Carles Puigdemont ha dado una nueva vuelta de tuerca a la apropiación de la Diada como jornada de reivindicación independentista en un discurso incendario, pronunciado en calidad de líder del Consejo para la República.
El expresidente ha llamado a los catalanes a prepararse para la confrontación pues, según ha dicho, "con los regímenes autoritarios no se pacta, para salvar la democracia hay que derrotarlos. Debemos ser herederos de esta tradición europea", en referencia a la estrategia de diálogo de ERC. De esta forma, Puigdemont ha comparado las instituciones del Estado con los regímenes totalitarios del siglo XX.
Entiende que el diálogo "no puede ser usado por el Estado para enmascarar la represión, que es activa, o para disminuir la presión internacional usando el falso argumento de que la mesa implica que el conflicto está en vías de solución".
"El Estado está debilitado y que hay que aprovecharlo" por lo que "la confrontación es inevitable y un deber inexcusable" pero que "no se 'improvisa, se prepara".
Entiende que, en las próximas elecciones catalanas, existen las condiciones para superar el 50% de los votos independentistas. "Mientras el mandato del 1-O no se materialice, cualquier elección al Parlamento tendrá un carácter referendario", ha dicho.