La letrada del Parlament Mercè Arderiu será una de las testigos clave de la defensa en el juicio contra los exmiembros de la Mesa, Anna Simó (ERC); Ramona Barrufet, Lluís Corominas y Lluís Guinó (JxSí), y la exdiputada de la CUP, Mireia Boya. Se sientan en el banquillo del TSJC acusados de permitir las leyes de desconexión durante octubre de 2017.
Pero la abogada que prestará declaración ante los magistrados para demostrar la inocencia de los imputados, habría prestado falso testimonio en su declaración ante el Supremo durante el juicio a los líderes del procés. Así lo demostraría una misiva que el actual presidente de la Cámara, Roger Torrent, remitió a la diputada de Ciudadanos María Valle, en la que admitió que los grupos parlamentarios no tuvieron acceso a la ley del referéndum, registrada el 31 de julio de 2017, hasta el 6 de septiembre, el mimo día se su aprobación.
Arderiu ante el Supremo
Arderiu manifestó ante el Supremo [VER AQUÍ, minuto 17:50] que el mismo día que se registró, los parlamentarios conocían su contenido porque se les había distribuido una copia. "¿Los grupos cuándo conocieron ese texto?", preguntó la abogada del Estado Rosa Maria Seoane a Alderiu, quien contestó. "El 31 de julio". La representante del Estado insistió: "¿Todos los grupos parlamentarios?", y la inquirida volvió a asentir, para añadir: "Cuando se presenta en el registro, normalmente se tramita una copia para todos los grupos parlamentarios". Extremo que niegan los afectados, tal y como señala la misiva remitida por Torrent a la formación naranja.
"La notificación formal a los grupos parlamentarios de la mencionada iniciativa legislativa se hizo a partir de su admisión a trámite por la Mesa", reza el documento que firma el presidente de la Cámara. Es decir, admite que no pudieron acceder a ella hasta septiembre, y no en julio, cuando se registró, como aseguró la letrada del Parlament ante el Supremo.