Los Mossos d'Esquadra han desalojado este viernes a un centenar de manifestantes independentistas después de que éstos cortaran durante media hora la avenida Meridiana de Barcelona para protestar por la sentencia a los políticos presos del procés.
Al igual que en días anteriores, la policía catalana ha intervenido al tratarse de una manifestación no comunicada y, por tanto, no autorizada, y en plena crisis sanitaria por el coronavirus.
El desalojo de los secesionistas, que antes de la pandemia contaron con la complicidad y el consentimiento de la Generalitat independentista y del Ayuntamiento barcelonés para interrumpir el tráfico y e impedir la libre circulación de la ciudadanía durante más de 140 noches, se ha producido sin incidentes destacables, a pesar de algunos momentos de tensión entre los asistentes y la policía.
Así, algunos de los radicales habrían sido indentificados por los agentes al intentar realizar cortes en otras calles aledañas, frustrando así su objetivo.