La manifestación de Vox contra el Gobierno colapsa el centro de Madrid

El centro de Madrid es un hervidero de ruidos de motores y claxons de los vehículos empleados por los asistentes a la manifestación convocada por Vox contra el Gobierno de Pedro Sánchez. La masiva afluencia de turismo y motocicletas ha hecho que llegaran a ocupar todo el recorrido diseñado por la manifestación, que encabeza el líder de la formación convocante, Santiago Abascal, a bordo de un autobús descapotado.

Los manifestantes han empezado a llenar el paseo de Recoletos de la capital de España desde las 11:00 horas y se han agolpado con sus vehículos particulares, con banderas de España, pancartas e incluso alguna bandera de la legión.

Recorrido bloqueado

Los vehículos han comenzado a dirigirse a la plaza de Colón para, desde allí, tomar la calle Goya, virar hacia Serrano, bajar por la céntrica calle Alcalá y terminar en la plaza de Cibeles, junto a la sede del Ayuntamiento de Madrid. Una hora después, los coches apenas podían circular e incluso empezaban a buscar una salida por otras vías.

A los manifestantes en coche se unieron algunos a pie, especialmente en el Paseo de Recoletos y la plaza de Colón, donde se iniciaba el recorrido.

"Gobierno dimisión" y "libertad"

Las consignas lanzadas que más se repetían piden la dimisión del Gobierno y reclaman libertad.

Abascal está acompañado en la cabecera de la manifestación por varios componentes de la cúpula de Vox como Rocío Monasterio, Iván Espinosa de los Monteros y Javier Ortega-Smith, recién dado de alta tras permanecer unos días ingresado debido a problemas de salud causados por su contagio del Covid-19.

Gritos contra la prensa

Algunos manifestantes también han proferido gritos contra la prensa, concretamente contra Televisión Española (TVE). En el marco de una conexión en directo del Canal 24 Horas, los participantes que se encontraban junto al redactor de la televisión pública han empezado a incrementar el ruido de sus motocicletas hasta hacer que fuera imposible escucharle. Al mismo tiempo, han lanzado proclamas de "televisión, manipulación".  

Mientras, participantes a pie se han unido a la escena desplegando banderas de España detrás del redactor, que incluso ha tenido que interrumpir la pieza durante unos instantes. A partir de entonces, el ruido ha cesado y le han permitido finalizar.