Después de casi seis semanas desde que se decretara la reclusión social para evitar la dispersión del coronavirus, se han conocido algunos detalles sobre cómo pretende aplicar el Gobierno la "desescalada" del estado de alarma.
La voz cantante de las medidas que se estipulen para ir, poco a poco, recuperando la normalidad la tiene el Ministerio de Sanidad, ya que todo depende de cómo evolucionen los datos de la pandemia en la sociedad. Un hecho que tendrá como consecuencia una salida del estado de alarma irregular, según el territorio.
Condiciones mínimas
Las conclusiones derivadas del estudio de estos datos, por parte de los expertos en epidemiología serán claves para tomar las decisiones de esta salida gradual del encierro.
Según ha adelantado la Cadena Ser, los asesores de salud pública del Gobierno apuntan a cuatro marcadores a tener en cuenta para comenzar a aplicar la desescalada: la tasa de contagio por cada persona infectada; la incidencia acumulada de positivos detectados; la tasa hospitalaria y el nivel de ocupación de las unidades de cuidados intensivos (UCI).
Tasas de dispersión y hospitalarias
La información publicada por la cadena de radio destaca que la aplicación del desconfinamiento comenzará por las zonas que mantengan durante dos semanas una tasa de contagio menor a uno (es decir, que cada infectado genere menos de uno nuevo) o una tasa de incidencia menor a dos casos nuevos por cada 100.000 habitantes.
Respecto a la capacidad de los centros hospitalarios, el número de ingresados por Covid-19 estaría por debajo del 30% mientras que la mitad de las camas de UCI de estos pacientes estarían libres.