Los independentistas vetan el debate sobre la falta de recursos contra el Covid-19

Son unos presupuestos diseñados con anterioridad a la crisis del coronavirus. Pero la Generalitat se empeña en aprobarlos tal como salieron del Consell Executiu. Ni enmiendas ni reasignaciones de partidas. Solo ajustes mediante futuros decretos ley. Lo cual alarga el proceso. Junts per Catalunya y ERC impidieron ayer que la Mesa del Parlament tramitara enmiendas posteriores al dictamen del Consejo de Garantías Estatutarias (CGE) --las normas así lo permiten-- con la finalidad de reasignar partidas entre áreas de gobierno.

Así lo pidió Ciudadanos, que habían preparado 53 enmiendas con las que se pretendían redirigir partidas hacia salud o servicios sociales, pero los socios del Govern alegaron que el citado órgano ha dictaminado que la ley de presupuestos se ajusta a la Constitución y el Estatut.

Precedentes

“Pero existen precedentes. En 2012, el CGE dio la razón al gobierno, pero se permitió presentar enmiendas”, explica a Crónica Global, vicepresidente de la Mesa del Parlament y diputado de Ciudadanos.

Joan García, vicepresidente de la Mesa del Parlament y miembro de la ejecutiva de Ciudadanos / CG

PSC y PP eran partidarios de que las enmiendas  salieran adelante, no así los partidos independentistas que, según García, “pretenden evitar que se debata en el Pleno la falta de recursos para dar respuesta a la pandemia. No quieren que se deje en evidencia que las cuentas ya no sirven”.

Pleno reducido y voto telemático

Así, las cuentas catalanas superarán este viernes su trámite final en un Pleno reducido para evitar contagios y con voto telemático. No obstante, la excepcionalidad del formato y el veto de los independentistas a las enmiendas no impedirán que la falta de recursos contra el coronavirus salga a lo largo de la sesión.

Sí llegan vivas las enmiendas al articulado que en su día presentaron los grupos de la oposición. El apoyo de los comunes, que negociaron las medidas fiscales que contemplan los presupuestos, garantiza la aprobación, lo que evitará una tercera prórroga, no así que las partidas hayan quedado desfasadas ante los efectos sanitarios y económicos del Covid-19.

De ahí que tanto PSC como Cs pidieran redistribuir gastos, esto es dar de baja algunas partidas para reasignarlas a áreas relacionadas con la lucha contra el coronavirus.

En este sentido, el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha manifestado que se trata de unos presupuestos “que no contemplaban el impacto del Covid-19, unos presupuestos que el gobierno no quiso negociar con el PSC y que no cuentan, por tanto, con nuestro apoyo”. Pero Iceta ha insistido en “nuestra disposición a acordar las modificaciones necesarias vía decreto ley o decretos leyes específicos para movilizar recursos adicionales”.