"¿Se siente responsable de la situación que atraviesa ahora Cataluña?" "No, en absoluto", ha sido la respuesta del exconsejero catalán de Salud Boi Ruiz sobre la saturación de los hospitales en plena pandemia del Covid-19. Y es que cuando fue titular del departamento, entre 2010 y 2014, durante la presidencia de Artur Mas, recortó 1.500 millones de euros del presupuesto del sistema sanitario en el territorio.
En una entrevista en el programa Planta Baixa de TV3, Ruiz ha sacado pecho de los ajustes presupuestarios durante la crisis económica, que redujeron de manera drástica la plantilla de profesionales en los hospitales de la comunidad autónoma. En plena emergencia sanitaria, y ante la alarma por un posible colapso del sistema, el exconsejero ha subrayado que los recortes de la Generalitat durante aquella época han permitido "asegurar la viabilidad" de la Sanidad y evitar su "quiebra".
Quiebra del sistema
"Tomamos las decisiones que tomamos con la idea fundamental de hacer viable el sistema sanitario y que no entrase en quiebra. Eso nos permitió mantener el que, estructuralmente, tenemos en la actualidad", ha manifestado Ruiz.
También ha deslizado que la responsabilidad de aquella reducción drástica de la sanidad catalana fue culpa del "Gobierno de Madrid". "La situación económica de la Generalitat que nos encontramos era de un déficit importante por nuestra financiación injusta, y el sector sanitario había sufrido en 2010 una importante reducción de recursos por instrucciones del Ejecutivo central", ha argumentado.
Disminución de las plantillas
Ruiz ha ido más allá para justificar el tijeretazo a la Sanidad catalana. Según él, la disminución de inversión solo tuvo una recupersión importante en el personal sanitario, mientras se mantuvo el funcionamiento de las infraestructuras hospitalarias.
"Se llevó a cabo un ajuste en las plantillas que aún se arrastra ahora", ha admitido. Eso sí, ha enmarcado esta falta de personal en la "baja disponibilidad de profesionales desde hace años" en el territorio.