El independentismo ya ha encontrado un nuevo objetivo sobre el que dirigir su furia dialéctica. Se trata del nuevo ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribe, al que le han bastado unas horas en el cargo para comprobar de primera mano lo mal que llevan algunos referentes mediáticos del secesionismo y sus seguidores la discrepancia con sus postulados.

El nuevo miembro del Gobierno de Pedro Sánchez, valenciano, de 51 años, y filósofo del Derecho, está recibiendo duras críticas en las redes sociales por sus planteamientos y opiniones de los últimos años acerca del procés y sus principales dirigentes. En especial, sobre el prófugo Carles Puigdemont (JxCat) y el líder de ERC, Oriol Junqueras.

Así, entre los mensajes que ahora están sacando a relucir diversas tuitstars del nacionalismo catalán, figura por ejemplo uno que escribió cinco días después de la declaración unilateral de independencia de Cataluña, en el que exponía "que Puigdemont y los suyos hablen de exilio, asilo o de presos políticos prueba su delirio, su ignorancia, su insensibilidad o todo a la vez".

"Puigdemont no asumió la responsabilidad de sus actos"

Rodríguez Uribes tiene claro que no puede considerarse "exiliado" alguien como Puigdemont, que tras romper la legalidad el 1-O y declarar la DUI en octubre de 2017, no asumió "la responsabilidad de sus actos" y se fugó para no rendir "cuentas ante la justicia".

Por aquellas fechas, como es lógico, el dirigente socialista defendió también la aplicación del artículo 155 de la Constitución Española para recuperar la ley y el orden democrático en Cataluña. Algo que los secesionistas también le echan en cara.

"Junqueras se cree Luther King"

Tampoco salía bien librado en sus críticas Oriol Junqueras, antes de que éste fuera encarcelado por el procés. Así, semanas antes de la consulta independentista del 9N de 2014, le afeaba su estrategia de tensión hacia el Estado, así como la réplica del ministro del PP José Manuel García Margallo, de plantear suspender la autonomía: "Tirando de la cuerda hasta que se rompa: Junqueras, que se cree Martin Luther King, y Margallo, que sueña con El Cid".

Más crítico aún se mostró el nuevo ministro y experto en Derecho con el líder de ERC semanas antes del referéndum ilegal del 1-O, al apuntar que "cuando Junqueras dice que Cataluña está bajo el Derecho Internacional quiere decir bajo el Derecho Natural. Natural interpretado a su manera".

Unas críticas, en definitiva, que le han hecho merecedor de una lluvia de críticas e improperios en las redes sociales por parte del independentismo más radical e intransigente.