Una decena de agrupaciones del PSC han presentado enmiendas que rechazan la propuesta planteada por la dirección del partido en la ponencia política para "flexibilizar" el sistema de inmersión lingüística escolar obligatoria exclusivamente en catalán que se aplica en las escuelas públicas catalanas.
La oposición a establecer un modelo bilingüe parte de las agrupaciones socialistas de L'Hospitalet Sud (Barcelona), Girona, Eixample (Barcelona), Sabadell (Barcelona), Castelldefels (Barcelona), Tarragona, Reus (Tarragona) y Granollers (Barcelona), además de La Joventut Socialista de Catalunya (JSC).
En defensa de la inmersión
El texto que se debatirá y votará en el congreso socialista de los próximos 13,14 y 15 proponía hacer "de la diversidad lingüística en Cataluña un activo, defendiendo el catalán y el castellano a través de un modelo plurilingüe en la escuela con la flexibilidad que la realidad sociolingüística presente en nuestro país exige".
Varias de las enmiendas presentadas reclaman incluir el término "inmersión" en la ponencia y que se defienda el actual modelo escolar monolingüe. "Seguiremos apostando y defendiendo la inmersión lingüística, el modelo que ha garantizado el éxito y la coexistencia de las dos lenguas en nuestro país, siendo una apuesta por la libertad, la igualdad y la inclusión social", indican las juventudes socialistas. Otras critican al independentismo y a las fuerzas conservadoras por hacer un "uso partidista" de la lengua y expresan la voluntad del PSC de evitar cualquier iniciativa que pueda contribuir a la división idiomática.
Una propuesta contra la inmersión
Sin embargo, también hay alguna enmienda que se decanta por la opción contraria. En concreto, una procedente de L'Hospitalet de Llobregat que pide que el uso del catalán como lengua vehicular sea una opción "voluntaria".
En esta propuesta se alerta del "concienzudo afán de hacer desaparecer la lengua española, la mayoritaria en las clases populares" que muestran algunos sectores.
Los expertos, con la dirección
Desde la dirección del partido se ha abogado por "flexibilizar" el modelo que se aplica actualmente y se ha apelado a un documento de 2018 firmado por el conseller de Educación de la Generalitat, Josep Bargalló, en el que se plantea que los centros deben tener en cuenta su "propio contexto sociolingüístico, el de su entorno, el bagaje lingüístico del alumnado y sus necesidades individuales", a la hora de dibujar su proyecto lingüístico.
Diversos expertos en este ámbito han valorado positivamente la propuesta por la dirección del PSC. Las principales entidades probilingüismo, en cambio, han mostrado sus dudas sobre la posibilidad de que el texto inicial sea aprobado en el congreso de la semana que viene.