Al Tribunal Supremo se le echa el tiempo encima para decidir la sentencia de los políticos independentistas en el conocido como juicio del procés. El miércoles 16 de octubre se cumplirán dos años desde que Jordi Cuixart y Jordi Sànchez fueron encarcelados, lo que supone el límite temporal de la medida de prisión preventiva. Por ello, la Fiscalía ha pedido a la Sala de lo Penal una vista para prorrogar la estancia en la cárcel del presidente de Òmniun Cultural y del expresidente de la ANC.
Los fiscales argumentan para respaldar esta petición que no es necesario llegar a la fecha de la expiración de la prisión provisional para que exista una prórroga. Sin embargo, es necesario que los magistrados que dilucidan sobre el juicio del 1-O se reunan para decretar dicha prórroga ya que, de lo contraro, se estaría vulnerando el derecho a la libertad personal. Y sin ella, además, los Jordis serían liberados.
¿Cuándo saldrá la sentencia?
La prórroga pedida por la Fiscalía se ha trasladado al resto de acusaciones y también a los abogados defensores de ambos independentistas, para que todas las partes se posicionen sobre ella y que el Supremo actúe en consecuencia. La sentencia aún no está lista, según confirmaron fuentes judiciales el pasado lunes, y la fecha en la que se daría conocer tampoco está fijada. Se prevé que se haga pública entre la semana vigente y la próxima, habida cuenta de la situación de Cuixart y Sànchez.
La decisión de los magistrados es compleja ya que, además de la vertiente política que conlleva el referéndum independentista del 1-O y la posterior declaración unilateral de independencia, se ha conocido la intención del juez Manuel Marchena, que preside el tribunal, de que la sentencia sea unitaria. Es decir, que todos los magistrados apoyen la condena sin que haya votos particulares.
Oposición del independentismo
Las voces discordantes con la petición fiscal no se han hecho esperar. Marcel Mauri, vicepresidente de Òmnium, ha declarado que esta medida es un ejemplo "vergonzoso" de cómo el Estado "retuerce las instituciones" para "mantener la unidad pasando por encima de cualquier derecho". Además, ha insistido en que el objetivo del procedimiento del Supremo "no es hacer justicia, es buscar venganza".