El CIS revela datos interesantes sobre la configuración del apoyo del mapa autonómico actual. Los catalanes piden un mayor grado de autonomía, que se traduce en los que querrían más autogobierno (25,3%) y los que apuestan directamente por la posibilidad de poder independizarse de España (29,8%). Eso se traduce en que un 55% quiere un status quo nuevo para Cataluña con un marco competencial y de reconocimiento mucho más amplio.
Por otro lado, un 26,4% de los catalanes consideran que la autonomía actual que tiene el territorio es suficiente. Estos datos, sumados a los que quieren más autogobierno, arrojan un dato revelador: un 51,7% de la ciudadanía prefiere la pertenencia en España con un sistema como el actual o uno federal antes que la independencia. La cifra sube hasta el 64,4% si se suman a los partidarios de centralizar el Estado (9,4%) o un sistema menos descentralizado (3,3%), según datos del CIS recogidos por La Vanguardia.
España autonómica
El conjunto del Estado defiende el sistema autonómico actual por gran mayoría. Un 41,1% de los españoles piensa que el modelo territorial actual es el más óptimo para organizar el conjunto de la estructura territorial. La defensa por el modelo surgido de la Constitución de 1978 se recupera, aunque en periodos anteriores a la crisis económica habían llegado a superar el 50%.
Por otro lado, el colectivo que piensa que España debería ser un estado unitario caen al 16,6%, uno de sus resultados más bajos y muy lejos del 24,9% de apoyos que obtuvo en noviembre de 2012. En ese momento, el estad de las autonomías pasaba por una crisis de legitimidad, puesto que solo un 32,6% de los encuestados los defendían como válido.