Gabriel Rufián continúa haciendo presión a PSOE y a Unidas Podemos para que alcancen un acuerdo de Gobierno. Y lo hace por la vía en la que más cómodo se siente: su perfil de Twitter. En esta ocasión, vuelve con la estrategia del miedo a lo que pudiera ocurrir si no se alcanza el conocido como pacto de izquierdas: Bertín Osborne podría acabar siendo el director de TVE.
Rufián llega incluso a repartir varios de los ministerios públicos entre los líderes de los partidos enmarcados en el centro y derecha del espectro político. La apuesta del diputado de ERC es que Inés Arrimadas, líder de Cs en Madrid, acabaría siendo ministra de Interior; Marcos de Quinto, congresista por el partido naranja, acapararía el Ministerio de Economía y Santiago Abascal podría hacerse con la cartera de Defensa.
La 'salvación': un acuerdo de izquierdas
En opinión de Rufián, lo único que puede hacer que estas cábalas acaban convirtiéndose en realidad es "un acuerdo de las izquierdas" y avisa, además, de que "o se consigue o lo de Madrid pasará en Moncloa". Es decir, que España será gobernada por un tripartito entre PP, Cs y Vox.
El republicano-tuitero ha aprovechado bien los 280 caracteres de esta red social y ha apuntillado su apuesta con un símil bastante violento: "El 10/11 [día en el que se podrían celebrar unas elecciones si no hay acuerdo Sánchez-Iglesias] es jugar a la ruleta con cinco balas".
Rufián la toma con Osborne
No es la primera vez que Rufián utiliza la figura de Bertín Osborne durante los pasados días para contenido en sus tuits. Hace un par de jornadas aprovechó los comentarios del conductor del programa Mi casa es tu casa sobre el feminismo para destacar algunos datos sobre la violencia de género y la discriminación laboral que sufren las mujeres.
El televisivo artista aseguró que, a día de hoy, "España no necesita un movimiento feminista" porque en el país "se han conquistado todos los derechos de la mujer que se debían conquistar". Ante esto, el republicano se sumó a las críticas hacia Osborne a través de las redes: "1.015 asesinadas en 10 años. Una brecha salarial del 23%. Un paro registrado del 17%. Unas 167.000 denuncias en 2018. Una brecha en pensiones del 37%. Un 67% de temporalidad laboral. Y lo que no está en las estadísticas. Pero oye que si Bertín Osborne dice que todo bien, pues todo bien".