La descomposición del independentismo ha obligado a Carles Puigdemont a aprovechar el liderazgo que todavía ejerce como “presidente legítimo” y convocar a representantes de partidos y asociaciones secesionistas en Ginebra. La idea es visualizar una unidad, ahora destrozada, de cara a unas elecciones catalanas que podrían celebrarse este año, tras la sentencia del Tribunal Supremo sobre el referéndum del 1-O.
Según ha podido saber Crónica Global, Puigdemont ha tocado a rebato y ha citado para este fin de semana en Ginebra (Suiza), muy posiblemente hoy, al presidente Quim Torra, así como a dirigentes de Junts per Catalunya, ERC, CUP, Assemblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium.
El reciente pacto entre Junts y PSC en la Diputación de Barcelona, la estrategia unilateral de ERC en el Congreso respecto a la investidura de Pedro Sánchez, así como el rechazo de los republicanos a volver a la senda de la ruptura unilateral, ha demostrado hasta qué punto los secesionistas están divididos. Por su parte, la ANC se mantiene como garante de esas esencias autodeterministas, mientras que la CUP parece buscar una aproximación con Junts y ERC tras su notorio desmarque, tras constatar su declive electoral.
Ginebra, ciudad fetiche del secesionismo
Ginebra, donde la ANC tiene una fuerte implantación y tienen su sede los principales organismos internacionales, se ha convertido en una ciudad fetiche para el independentismo. En Suiza viven la secretaria general de ERC, Marta Rovira, y la exdiputada de la CUP, Anna Gabriel, tras su fuga de la Justicia española. Asimismo, el informe del grupo de trabajo de la ONU en el que se cuestiona la permanencia de los dirigentes independentistas en prisión preventiva, ha supuesto un balón de oxígeno internacional para Puigdemont y los suyos.
Fue en esta ciudad donde, recientemente, se reunieron Puigdemont y Artur Mas para intentar apuntalar la cohesión interna de Junts y abordar la investidura de Sánchez, que rechazan los duros del expresident.