No hubo sorpresas de última hora y, tras los acuerdos alcanzados, el candidato del Partido Popular José Luis Martínez-Almeida ya es nuevo alcalde de Madrid en sustitución de Manuela Carmena.
Almeida ha superado la votación en el Pleno de la constitución de la corporación municipal de la capital, y estará al frente de un gobierno de coalición con Ciudadanos y apoyado por los ediles de Vox. De este modo, han sumado un total de 30 votos (los 15 ediles del PP, más los 11 de Cs, junto a los 4 de Vox).
Begoña Villacís, vicealcaldesa
PP y Ciudadanos alcanzaron en primer lugar anoche un pacto para que el candidato ‘popular’ José Luis Martínez-Almeida fuera el nuevo alcalde de la capital, al frente de un Ejecutivo de coalición con Begoña Villacís (Cs) como vicealcaldesa.
Las dos formaciones han pactado un Gobierno y una hoja de ruta con 80 medidas programáticas, un acuerdo del que queda excluido Vox
Generosidad de Ciudadanos
Después de que Cs haya renunciado a su propuesta de compartir la Alcaldía en turnos de dos años, Almeida ha agradecido a la formación naranja su “generosidad” para alcanzar un pacto que les permita gobernar para efectuar un cambio.
Por su parte, Villacís ha recalcado que se trata únicamente de “un acuerdo de gobierno entre PP y Ciudadanos” y serán ellos “quienes gobiernen”, a partir de una “hoja de ruta” con 80 medidas pactadas entre ambos partidos que “no son sugerencias”, y se ha cuidado de no mencionar a Vox, a pesar de las insistentes preguntas de los periodistas.
"Reparto justo"
La candidata de Ciudadanos ha señalado que su cargo como previsible vicealcaldesa es un “reparto justo” en el que se ha sabido reconocer cómo Cs ha crecido respecto a las pasadas elecciones de 2015, tanto en las medidas de la ciudad como en las áreas de Gobierno.
En este pacto se han repartido las áreas de Gobierno, en el que los populares se quedarán con cinco, entre ellas la portavocía y movilidad, de la que depende Madrid Central, mientras que la formación naranja dirigirá cuatro concejalías.
El Orgullo Gay, inalterable
En su acuerdo programático ambos partidos se comprometen a mantener la celebración del Orgullo LGTBI en su ubicación “habitual” por ser “una marcha reivindicativa, inclusiva y transversal” -que Vox pedía trasladar a la Casa de Campo-, así como un plan de detección temprana de la violencia machista.
Además, hablan de “reconvertir” Madrid Central para volver a las antiguas áreas de prioridad residencial (APR) y prometen soterrar la A-5 a su llegada a Madrid.