El primer secretario del PSC y líder de los socialistas catalanes en el Parlament, Miquel Iceta, será nombrado presidente del Senado en sustitución del popular Pío García-Escudero, tras aceptar la oferta que le ha hecho el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Iceta, de 58 años, no es senador pero ocupará un escaño por designación de la cámara autonómica. En concreto, el que ostentaba hasta ahora el expresidente de la Generalitat José Montilla, que renunciará a su asiento en las próximas horas. El nombramiento de Iceta como senador probablemente se producirá este jueves.
Seguirá en el Parlament y al frente del PSC
El nombramiento del dirigente socialista catalán al frente de la Cámara alta --que se constituye el próximo 21 de mayo-- está garantizado, toda vez que el PSOE tiene mayoría absoluta tras las elecciones generales del 28A.
La intención del dirigente socialista es compatibilizar su nueva responsabilidad con la dirección del PSC y con su escaño en el Parlamento catalán. Aunque, preguntado por esta cuestión antes de la sesión plenaria de este miércoles en la cámara autonómica, ha dicho que "ya lo iremos hablando".
Estrategia federalista
La elección de Iceta por parte de Sánchez para presidir el Senado se enmarca en la estrategia socialista para avanzar hacia un modelo territorial del Estado en clave federal, empezando por la Cámara alta.
Cabe destacar que el líder del PSC es uno de los principales promotores de una reforma constitucional y estatutaria en esa línea.
Institución clave para el 155
De esta forma, Iceta estará al frente de una institución clave para la aplicación del artículo 155 de la Constitución, en caso de que se repitiese el desafío secesionista.
La activación de esta prerrogativa --que permite al Gobierno intervenir una comunidad autónoma en caso de incumplir la Carta Magna, como ocurrió en Cataluña a causa del procés-- requiere su aprobación por mayoría absoluta en el Senado previo requerimiento del presidente del Gobierno al del ejecutivo autonómico correspondiente.
El PP, "muy preocupado"
El presidente del PP, Pablo Casado, se ha apresurado a criticar el nombramiento de Iceta como presidente de la Cámara alta.
"Si el presidente del Senado, que tiene que aplicar el artículo 155, es el que ha dicho que habrá una consulta sobre independencia en Cataluña en diez años, me deja muy preocupado", ha señalado el líder popular.
Larga trayectoria
La trayectoria de Iceta en el mundo de la política es larga. Empezó a interesarse por la política mientras cursaba COU y acudía a sus primeros actos de fuerzas de la izquierda. Se sumó a las juventudes socialistas en 1978, fue concejal en Cornellà de Llobregat (Barcelona), formó parte de la cocina de la Moncloa en los primeros gobiernos de Felipe González, ascendió como número dos del partido al lado de Montilla, fue ponente del PSC en la redacción del nuevo Estatut y ha sido uno de los ideólogos de la propuesta federal del PSOE, recogida en la Declaración de Granada.
Entre 1996 y 1999, fue diputado en el Congreso y desde entonces lo ha sido en el Parlament, donde ahora preside el grupo de PSC-Units. En julio de 2014, en plenas turbulencias y tras el adiós de Pere Navarro como primer secretario del PSC, Iceta dio un paso al frente, para intentar pacificar el partido y frenar su desplome electoral.
Aliado de Sánchez
Iceta se mantuvo fiel a Pedro Sánchez hasta su abrupta dimisión en 2016, lo que sumado al no del PSC a la investidura de Mariano Rajoy provocó una crisis con el PSOE que estuvo a punto de traducirse en divorcio.
Meses después, el regreso de Sánchez como líder del PSOE permitió a Iceta erigirse en uno de los barones más influyentes y en un contrapeso territorial a la líder socialista andaluza Susana Díaz, tras lograr además que el PSOE asumiera la defensa de la plurinacionalidad.
Su papel en el 'procés'
Iceta fue uno de los mediadores que trató, sin éxito, que Carles Puigdemont frenase la declaración unilateral de independencia en octubre de 2017 y convocara elecciones.
Justo después, se ganó las iras del independentismo al avalar, como el PSOE, la aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña, lo que ha dificultado desde entonces su interlocución con JxCat y ERC.
Polémicas
En las filas socialistas valoran su soltura ante los medios, aunque en más de una ocasión se ha convertido en un arma de doble filo, al desencadenar polémicas por las que el PSOE ha acabado siendo blanco de los ataques de PP y Cs.
Entre esos casos destacan su posición pública a favor de los indultos a los líderes independentistas presos, en caso de ser condenados, o sus recientes declaraciones en las que afirmó que, si el 65% de los catalanes estuviera a favor de la independencia, la democracia debería buscar una solución, en referencia a un referéndum.
Curiosidades
Adicto a la Coca-Cola Zero --antes prefería la light-- y amante de los gatos, en 1999 fue uno de los primeros políticos españoles en declarar su homosexualidad, cuando Jordi Petit, pionero activista LGTBI, le pidió que como político conocido diera ese paso adelante.
En el arranque de la campaña de las autonómicas catalanas de septiembre de 2015, el baile desinhibido de Iceta al ritmo del Don't stop me now de Queen, junto a un Pedro Sánchez atónito, se convirtió en fenómeno viral.