El candidato de ERC a la alcaldía de Barcelona, Ernest Maragall, ha detallado este miércoles cuál es su política de pactos preferida de cara a las elecciones municipales del 26 de mayo. En un encuentro con empresarios en Foment de Treball, ha asegurado que pasa por “los comuns y el centro derecha”.
El veterano político ha confesado que las formaciones lideradas por Ada Colau y Elsa Artadi --como número dos de la lista de JxCat que encabeza Joaquim Forn, en prisión-- son las que considera que tienen más puntos en común para conseguir su gran objetivo, el de impulsar un programa de gobierno basado en el "progresismo y la república". Señala que ambos elementos serán la base de lo que denomina "presupuesto de mandato", el acuerdo con otras fuerzas si en los comicios locales se confirma la tendencia que se apunta en las encuestas. Es decir, una victoria clara de los republicanos pero sin la fuerza necesaria para gobernar en solitario.
Gobierno en minoría
De hecho, Maragall ha confesado al empresariado catalán que durante la campaña intentará arañar votos del resto de formaciones. Recuerda que en la última legislatura en la ciudad se ha demostrado que un Gobierno en minoría es factible, pero con muchos problemas para poder sacar adelante el programa electoral que le había brindado la victoria.
Se ha resistido ha cerrar la puerta de forma definitiva a Colau, tal y como se le ha requerido en el turno de preguntas desde la sala y ha bromeado en que su pacto preferido de Gobierno "es con ERC". Con todo, se ha mostrado muy crítico con las políticas que ha aplicado la alcaldesa y algunas salidas de tono, como culpar a la Generalitat de que existen problemas de seguridad en Barcelona por la falta de efectivos de Mossos d’Esqudra.
Programa electoral
En cuanto a la estrategia política para los próximos cuatro años en Barcelona, Maragall ha defendido la colaboración público-privada para desarrollar las infraestructuras que están pendientes de ejecutar en la ciudad; la rehabilitación como una de las políticas puntales para conseguir una localidad más verde y sostenible; repensar la movilidad con una mayor apuesta por el vehículo eléctrico; y apostar por un salario mínimo de referencia para el ámbito metropolitano. En este sentido, ha apostado de nuevo por el diálogo con los agentes sociales para poder llevarlo a cabo.
También ha prometido una solución por los problemas de seguridad de la ciudad. "A mí me preocupa, por eso quiero solucionarlos", ha declarado, además de reivindicar Barcelona como una "ciudad-país" frente a "Madrid, la ciudad-estado". Con todo, asegura que negociará y hablará con el Estado "todo lo que sea necesario".
Políticos presos
En clave del procés, ha afirmado a los empresarios de Foment del Treball que los "prisioneros políticos deben volver a la libertad absoluta, es urgente". Maragall afirma que esto no es sólo una política municipal, sino que advierte que "no debe desaparecer de la agenda".