El PSC mantendría su feudo del Baix Llobregat y l'Hospitalet

El PSC se erige como fuerza predominante en la comarca del Baix Llobregat y la ciudad de l'Hospitalet de Llobregat, puesto que mantendría el liderazgo que consiguió en 2015. Sus alcaldías no corren peligro y podría incluso aumentar en votos (más de 5.000). Eso sí, una abstención baja podría perjudicar a los socialistas mucho más que el crecimiento de cualquier otro partido. 

La encuesta  –realizada por CELESTE-TEL para el diario comarcal El Llobregat– asegura que una de las principales novedades consistiría en el sorpasso de ERC a los comunes, que pasarían a ocupar el segundo puesto en votos en los municipios que corresponden al Baix Llobregat. De hecho, En Comú Podem bajaría 3 puntos, los mismos que ganaría la formación que lidera Oriol Junqueras. 

Cambios en la derecha

Ciudadanos y PP van a la baja, aunque caería con mucha más intensidad el partido de Pablo Casado. De hecho, la formación conservadora podría perder casi 5.000 votos (-1,5%) en comparación con los resultados de las anteriores elecciones municipales. De la misma forma, la formación naranja registraría un leve descenso con 1.812 papeletas menos (-0,5%).

En cambio, Vox subiría con fuerza y entraría a los consistorios comarcales con más de 9.000 votos (2,8%). De hecho, podría ser que consiguiera algún representante electo en l'Hospitalet o en las ciudades de la zona del Delta del Llobregat (Cornellà, El Prat o Sant Boi). 

Crecida independentista

Esquerra Republicana sería la primera formación independentista que conseguiría penetrar en el Baix Llobregat y en l'Hospitalet, zona históricamente opuesta a las tesis independentistas. La crecida de ERC, con más de 8.000 votos (2,6%) de diferencia en comparación con 2015, compensan la caída de Junts per Catalunya y de la CUP en estos municipios. 

La formación que impulsa el expresidente fugado desde Waterloo caería en 2.000 votos (-0,8%). En cuanto a los antisistema de la CUP, quedarían prácticamente igual aunque llegarían a perder casi 300 votos en comparación con los anteriores comicios locales (-0,1%). 

Voto fiel

El PSC es el partido que tiene el electorado más fiel en esta comarca. El feudo histórico del socialismo catalán consigue un 86% de personas que aseguran que votaron a esta formación política y que lo volverán a hacer en los comicios del 26M, aunque sufre una ligera pérdida de votantes hacia los comunes y Cs. En Comú Podem es el partido con el nicho de votantes más infiel, puesto que solo un 60% de los electores volverían a hacerlo; el resto se reparten a partes iguales entre ERC y socialistas. 

El voto independentista se mantiene bastante compacto, aunque liderado por ERC. La formación de Junqueras conseguiría casi el 84,4% de fidelidad, aunque tiene pequeñas fugas a la CUP y el PSC. JxCat cosecha un 79,9% en comparación con los resultados de CiU en 2015, aunque algunos votos se irían a los republicanos y a Cs. En cuanto a la CUP (69,8%), casi un cuarto (23,3%) abandonarían el partido para votar a Esquerra.

Derecha y nuevos votantes

El voto de la derecha también se mantiene muy fiel. El Partido Popular conseguiría una fidelización del 77,1%, aunque sufriría fugas de voto a partes iguales entre Vox y Ciudadanos (un 6,4% cada uno). Asimismo, se refleja un ligero escape al PSC. Ciudadanos retiene el 71,6% de voto de 2015, aunque un 11% se iría a Vox y un 8,3% tiene previsto votar a los socialistas. 

¿Y qué elegirán los nuevos votantes? El mantra de que la independencia se impone entre los jóvenes parece falsa, o al menos en el caso de los vecinos del Baix Llobregat que ejercerán su derecho por primera vez. Los socialistas catalanes se convierten en la opción favorita del 30% de los jóvenes, a los que les sigue En Comú Podem con un 18%. ERC consigue un 13,5% de voto nuevo, la CUP un 3,9%, mientras que JxCat se apodera del 9,1%. Las derechas serían las más perjudicadas: Cs, 8,8%; PP, 5'5%; Vox, 3,4%.