Más xenofobia. Núria de Gispert, expresidenta del Parlamento catalán, ha vuelto a insultar a Inés Arrimadas, diputada en el Congreso de Diputados y exlíder de la oposición en Cataluña tras conocerse que recibirá la Creu de Sant Jordi, la máxima distinción autonómica.
De Gispert, que perdió su empleo y fue reprobada por el Parlament por su supremacismo independentista, ha vuelto a invitar a salir de Cataluña a la líder de Ciudadanos en la región. También la ha enviado a "leer Telva, Hola y Pronto". Lo ha hecho De Gispert en su cuenta oficial de Twitter, canal en el que la exdiputada suele airear su xenofobia ante el silencio del resto del independentismo.
"Inés, estarás mejor en Madrid"
En un tuit en su cuenta oficial en la red de los 280 caracteres, la expolítica de Unió Democràtica de Catalunya (UDC), ahora en Demòcrates y cercana al grupo del filósofo y candidato a alcalde de Barcelona Jordi Graupera, ha aseverado que "Inés estará mejor en Madrid". Según De Gispert, la hasta ahora líder de la oposición en Cataluña "se va ella solita dentro de unas semanas. Tú te lo has buscado. La bilis que escupes contra gran parte de Cataluña te obligó a irte. Tu éxito, muy efímero. Seguro que en Madrid estarás mejor. Más cerca de Telva, Hola o Pronto. Olvídate de Cataluña".
El nuevo tuit xenófobo de la expresidenta de la cámara catalana llegó como respuesta a otro mensaje de Arrimadas, que lamentó que el Gobierno catalán de Quim Torra distinga a la expolítica. "Esta señora me ha echado de Cataluña varias veces por no nacer aquí y ha insultado a otros líderes políticos. El nacionalismo premia a xenófobos haciéndoles presidentes de la Generalitat o dándoles la Cruz de Sant Jordi, una de las máximas distinciones otorgadas en Cataluña", recordó la electa en la cámara baja.
Reprobada por su xenofobia
La nueva muestra de supremacismo de la activista independentista se une a una larga lista de exabruptos xenófobos. En noviembre de 2017, De Gispert invitó a Inés Arrimadas a "volver a Cádiz". El pasado año, la expresidenta de la cámara catalana volvió a invitar a marcharse de Cataluña a la líder de la oposición en al menos tres ocasiones. También arremetió contra La Vanguardia.
Antes de ello cargó la expolítica secesionista contra el profesor de la Universidad de Barcelona (UB) y colaborador de Crónica Global, Gonzalo Bernardos, y los asistentes a un mitin de Ciudadanos, a los que acusó de "cobrar". Su incontinencia tuitera provocó que la activista independentista perdiera su empleo como Defensora del Mutualista y que encajara una reprobación del Parlamento catalán, cámara que ella misma presidió de 2010 a 2015.