El exdirector del Servicio Catalán de Salud dice que solo hubo cinco heridos graves el 1-O
Un 68% de los atendidos fueron hombres, mayores de 40 años y menores de 65. Entre los dos casos más graves se encuentra el de Roger Español y el del señor que sufrió un infarto
30 abril, 2019 18:09El exdirector del Servicio Catalán de Salud (CatSalut), David Elvira, ha reportado cinco heridos graves durante la jornada del referéndum ilegal del 1 de octubre en su declaración en calidad de testigo ante el Tribunal Supremo. De los 1.066 atendidos --991 durante el día de la votación--, hubo cinco casos de mayor gravedad, que incluyen la pérdida del ojo de Roger Español, dirigente de Front Republicà, y el ciudadano que sufrió un infarto. El resto consistieron en "contusiones" y "heridas", así como "traumatismos craneales, crisis de angustia y fracturas". Elvira ha explicado que "hubo diagnósticos graves como traumatismos craneales, pero la mayoría eran leves".
Del total de atendidos, algunos de ellos en días posteriores al referéndum ilegal, un 68% fueron hombres mientras que un 32% fueron mujeres. La mayoría de atenciones eran de mayores de 40 años y menores de 65. La distribución de los atendidos también fue "territorialmente desigual", ha explicado Elvira. Una de cada cuatro se registraron en Girona, que no representa la zona más poblada. De los 991 heridos, 9 fueron agentes de las fuerzas y cuerpos de seguridad.
Los cincos graves fueron, ha especificado el testigo, un infarto de miocardio (en el Hospital universitario Vall d'Hebron): un caso de fractura de suelo orbitario y maxilar superior derecho con afectación del glóbulo ocular (Hospital de Santa Creu i Sant Pau); un caso de traumatismo craneoencefálico y abdominal con crisis hipertensiva (Hospital Plató); otro caso de traumatismo craneoencefálico con pérdida de consciencia (Hospital Santa Caterina); y un caso de traumatismo de espalda derecha y traumatismo muscular de trapecio derecho (Hospital de la Senta Creu i Sant Pau).
Datos médicos
A las preguntas del fiscal Jaime Moreno, ha informado que los registros no se extendieron a los centros hospitalarios de titularidad exclusivamente privada: "todo lo que no fuera un un proveedor del Siscat no se registró". A este respecto, ha añadido que la asistencia médica de la VII Zona de la Guardia Civil no fue incluida en el informe de Salut, pero ha aclarado que no le constaba "que hubiera ninguna queja por parte de policías de no haber sido debidamente atendido".
Respecto a los datos sobre los heridos, Elvira ha asegurado que el "Departamento de Salud nunca puso en duda los datos de los profesionales" y ha señalado las "cargas policiales" como causa de las heridas.
Un votante con toga
Previamente a la declaración del exdirector de CatSalud, el testigo Ramón Forteza ha explicado, junto a los otros lesionados del 1-O, los hechos que vio. Ha explicado que quiso votar en la sede del Departamento de Bienestar Social de Lérida, pero que "cuando llegué vi que había llegado la Policía". "El ambiente era de preocupación. Allí nos conocemos todos, Una señora me dijo 'es que está mi hija dentro con su novio y llevan diez minutos dentro retenidos. A ver si puede hacer algo, usted que es abobado'. Me acerqué y me presenté pero me expulsaron a golpes, no me dio tiempo ni de explicarme", ha relatado.
Forteza se fue a su despacho y cogió la toga: "No me la puse e intenté volver a explicarme, que no iba como votante sino como abogado pero otra vez palo. Me puse la toga y les dije que era el abogado de las personas que estaban allí retenidas. En ese momento empezaban a expulsar a la gente de dentro. Vi a una señora de más de sesenta años pateándola. Me abalancé para protegerla y fue una mala estrategia porque me golpearon a mi también".
Finalmente, ha dicho que logró "sacarla" y llamó a "los Mossos para que llamaran a una ambulancia porque esa señora se nos iba a caer en cualquier momento". Y regresé para ejercitar el derecho de defensa nuevamente. Entonces salieron los agentes con las urnas y se marcharon y ya está".