Neus Lloveras, expresidenta de los municipios independentistas, ha encajado hoy una denuncia ante la Junta Electoral. La alcaldesa de Vilanova i la Geltrú (Barcelona), a la sazón exlíder de la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI), mantiene una pancarta por los independentistas en prisión pese a las advertencias del organismo de control electoral.
Según ha informado Ciudadanos, la formación ha presentado hoy miércoles una triple denuncia ante la Junta Electoral de Zona (JEZ). Uno de los escritos protesta por la pancarta política de Vilanova, mientras que el otro se refiere al municipio de Vilafranca del Penedès (Barcelona), en el que también hay colgados lazos amarillos y simbología independentista de la fachada del ayuntamiento. La tercera denuncia se refiere a la localidad de Canyelles (Barcelona), situada también en la comarca del Garraf, y en la que también se estarían vulnerando la neutralidad de las instituciones.
"Pancarta más alta"
Según el partido naranja, Lloveras ha mantenido el pendón en favor de la libertad de los encausados por el procés en la fachada de la casa consistorial. Ello supone que no "respeta la neutralidad política de las instituciones y el espacio público y no se da cumplimiento a la legalidad", según la formación. Ciudadanos ha insistido en la necesidad de "tener unas instituciones y espacios públicos sin lazos amarillos ni simbología política partidista".
¿No ha obedecido pues la expresidenta de la AMI y munícipe de Vilanova i al Geltrú las resoluciones de la Junta Electoral Central? "En absoluto. Lo que ha hecho es colgar la pancarta por los políticos presos más arriba, pues la habían quitado las brigadas de limpieza. Y los lazos amarillos lucen ahora desde dentro de las ventanas", han indicado fuentes cercanas al caso. Algo similar, un despliegue de simbología independentista, estaría ocurriendo en Vilafranca y Canyelles.
En Barcelona, sin lazos
Las triple denuncia de Ciudadanos llega después de que una iniciativa similar consiguiera que el presidente catalán, Quim Torra, retirara una pancarta similar con un lazo amarillo colgada del Palau de la Generalitat de Cataluña. El jefe del Ejecutivo autonómico cumplió, tarde, las resoluciones de al Junta Electoral de vaciar de simbología independentista las sedes del Gobierno catalán. Dicha demora le ha valido una querella de Fiscalía por presunta desobediencia.
Una denuncia similar presentada por el grupo popular en el Ayuntamiento de Barcelona, que comanda Alberto Fernández Díaz, consiguió que la alcaldesa de la Ciudad Condal, Ada Colau quitara de la fachada de la casa consistorial un lazo amarillo independentista.