Una bandera independentista catalana de enormes dimensiones y una pancarta anónima a favor del denominado 'paro de país', convocado para este jueves en Cataluña por parte de organizaciones secesionistas, ocupan desde la semana pasada la fachada de uno de los claustros del rectorado de la Universitat de Lleida (UdL).
La estelada, de unos 20 metros de alto por 10 de ancho, tapa cuatro ventanales y un par de pórticos de la planta baja del recinto. A escasos metros de ella se encuentra una lona vertical con diversos lemas a favor de los políticos en prisión preventiva por el procés: "No es un juicio, es una farsa. La lucha continúa. Libertad encausadas, 21F huelga general", reza el escrito, que no lleva firma, aunque fuentes universitarias atribuyen su posible autoría a grupos estudiantiles.
Discrepancias entre el claustro y el rector
El miércoles de la semana pasada, el claustro de la UdL aprobó por mayoría absoluta una declaración para reclamar la liberación de los presos independentistas y contra lo que consideran una judicialización de la política catalana. El documento salió adelante por 115 votos a favor, 12 en contra, 12 abstenciones y un voto nulo.
El rector, Roberto Fernández, destacó en su discurso en la necesidad de mantener la neutralidad institucional y la no conveniencia de aprobar este tipo de manifiestos: "La Universidad no debe tomar partido, aunque la comunidad universitaria puede expresar sus opiniones. Solicito independencia y neutralidad para la institución, no entrar en el debate partidario por el bien de todos los ciudadanos”, señaló.
Estelada gigante en la Universitat de Lleida / @JaulaAmarilla
Protesta con cadenas
Los impulsores del documento y del claustro extraordinario --más de un centenar de representantes del profesorado, estudiantes y del personal de administración y servicios-- adujeron que su declaración no pide un posicionamiento político ni partidista, sino “la defensa de Derechos Humanos”. El texto contó con cerca de medio millar de adhesiones de miembros de la comunidad universitaria, según sus promotores.
El martes pasado, un día antes de la declaración favorable a la liberación de los políticos en prisión preventiva, un grupo de jóvenes organizó una protesta cerrando con cadenas todas las puertas del rectorado, lo cual obligó a abrir un acceso de emergencia para permitir la entrada y salida de profesores y estudiantes