Desde hace años, el independentismo catalán aprovecha cualquier acto público para difundir sus reivindicaciones, sin importarle impregnar de contenido político todo tipo de celebraciones que, en un principio, están llamadas a ser transversales.
En algunos casos, esa apropiación de las actividades por parte del nacionalismo se lleva a cabo sin importar que haya menores implicados --como pasó en el tradicional concierto de San Esteban interpretado por el Orfeó Català en el Palau de la Música hace apenas unos días-- o precisamente para manipularlos o adoctrinarlos, como ha ocurrido en algunas de las cabalgatas de los Reyes Magos.
La cabalgata ‘indepe’ de Sabadell
La última actuación destacada en esa línea ha tenido lugar en Sabadell (Barcelona), donde el gobierno municipal liderado por Maties Serracant --de la coalición Crida per Sabadell, cercana a la CUP-- ha permitido la introducción de proclamas secesionistas en el desfile de este sábado con motivo de la festividad de los Reyes Magos.
Según ha denunciado la sección local del PSC, en la cabalgata “aparecerán paquetes donde se pedirá la libertad de los políticos encarcelados” que están acusados de rebelión o sedición. Se trata de cajas que simulan regalos con carteles de los destinatarios, que casualmente son los de los activistas en prisión preventiva, e incluyen lazos amarillos. Los socialistas ya han exigido la “retirada” de estos elementos, pues este es “seguramente el evento menos indicado del año para proclamar mensajes políticos”.
Reincidentes
En todo caso, desde el PSC recuerdan que “el ayuntamiento persiste en su error de politizar un espacio de ilusión y dedicado a los menores”, pues el año pasado ya sucedió algo similar.
En aquella ocasión, a las carrozas de los Magos de Oriente les acompañó una procesión de Seat 600 que transportaban los regalos que lucían mensajes de “libertad” para los presos en prisión preventiva, convirtiendo el desfile en una suerte de manifestación independentista.
Dos farolillos con la bandera 'estelada' decoran una imagen promocional de la cabalgata de Reyes de Vic
Los farolillos con ‘esteladas’ de Vic
El caso más polémico de manipulación infantil de los últimos tiempos sucedió durante la cabalgata de los Reyes Magos organizada por el Ayuntamiento de Vic en 2017. La ANC y Òmnium Cultural hicieron un llamamiento a “pequeños y grandes” para recibir a Sus Majestades con unos farolillos amarillos que incluían una estelada y que se encargaron de repartir entre los asistentes. El desfile se retransmitió en directo por TV3.
“Les pedimos que en 2017 nos traigan la República catalana”, señalaban los pasquines difundidos por las entidades nacionalistas, en los que también animaban a “llenar con esteladas las ventanas y balcones del recorrido” de la cabalgata.
ANC: Un acto de “normalidad”
Aquella acción generó importantes críticas no solo de los sectores constitucionalistas --desde los partidos a las entidades--, sino también por parte de algunos independentistas --“No me gusta, a algunos nos chirría, yo no lo haría”, llegó a decir el diputado de ERC en el Congreso Gabriel Rufián--, hasta el punto de que Òmnium se desmarcó a última hora de la iniciativa. Mientras que el Govern, a través de la que entonces era su portavoz, Neus Munté, se puso de perfil y mostró su “respeto” hacia la reivindicación.
Por su parte, el entonces presidente de la ANC, Jordi Sànchez --hoy en prisión preventiva por su implicación en el procés--, defendió la “normalidad” del proyecto, lo que justificó con el hecho de que se venía realizando desde hacía cuatro años. En todo caso, insistió en que repartir farolillos con esteladas para la cabalgata de los Reyes Magos no le parecía ninguna forma de “politizar” una “fiesta de los niños, sino aportar elementos que forman parte de un imaginario colectivo que se asocian con la idea de la fiesta”.
Badalona: “Estado de excepción”
La ANC de Badalona también se apuntó a una campaña similar. El lema “vayamos a recibir a los Reyes Magos con los farolillos de la estelada” recibió el apoyo de ERC. Y un año más tarde, la ANC repartió de nuevo cientos de farolillos con la bandera independentista en la cabalgata de los Reyes Magos en la localidad barcelonesa y animó a los asistentes a vestir prendas amarillas para reivindicar la libertad de los encarcelados en prisión preventiva por su responsabilidad en el intento de secesión unilateral de unos meses antes.
El coordinador local de la entidad nacionalista, Josep Hernández, justificó la iniciativa en un acto para niños por considerar que la situación que se vivía era propia de un “Estado de excepción” por lo que el objetivo era “no normalizarla”.
El rey Baltasar, con los presos del ‘procés’
También en 2018, la cabalgata de los Reyes Magos de Manresa (Barcelona) --la elegida por TV3 para su retransmisión en directo-- contó con un marcado perfil adoctrinador para los niños.
Más allá del llamamiento de la ANC y Òmnium Cultural a los asistentes para recibir a los Reyes Magos con prendas amarillas, el rey Baltasar se despachó a gusto. “Hemos visto niños separados de sus familias por la prisión, el exilio y otras situaciones injustas”, indicó en un mensaje público.
El niño Jesús con la ‘estelada’ en Berga
En las fiestas de Reyes de 2017, la tradicional representación de Els Pastorets en Berga (una obra de teatro sobre el nacimiento de Jesucristo) contó con un guion peculiar: el niño Jesús aparecía en el escenario con una gran estelada.
Además, algunos de los menores que participaron en el espectáculo también salieron a escena luciendo una bandera independentista.
El Melchor antiborbónico en Barcelona
Hace tres años, el rey Melchor aprovechó su discurso en el barrio de Sarrià de Barcelona para lanzar una diatriba antiborbónica. “Nosotros sí que traemos regalos para todos, no como los borbones que quieren quedárselos todos ellos”, señaló el Mago.
Cabe destacar que el rey tenía un gran parecido con el consejero de Barcelona en Comú Jaume Llansó, y que sus palabras generaron algunos pitos entre los asistentes a la cabalgata.
El rey Gaspar, contra el Tribunal Constitucional
Pero la politización independentista de la cabalgata de los Reyes Magos viene de lejos. Basta recordar las críticas del rey Gaspar --muy parecido a Queco Novell, humorista del programa Polònia de TV3-- a los jueces del Tribunal Constitucional.
“El carbón lo tenemos reservado para cuatro o cinco jueces del Tribunal Constitucional”, señaló a BTV el rey mago, en una época en la que el alto tribunal ultimaba la sentencia sobre el Estatut.