La politización de los actos públicos es una constante en el nacionalismo catalán y las cabalgatas de los Reyes Magos no se libran de esa manipulación, especialmente en los últimos años.
Tampoco se ha escapado de esta utilización partidista la recepción oficial de los Magos de Oriente que ha acogido hoy el Ayuntamiento del distrito de Sant Andreu en Barcelona, cuyo balcón estaba engalanado con un lazo amarillo en defensa de los independentistas en prisión preventiva acusados de rebelión o sedición.
"A los que no podrán estar con sus hijos"
En un momento del discurso, uno de los Reyes Magos ha rememorado --sin citarlos directamente-- a los dirigentes independentistas encarcelados ante los asistentes, en su mayoría familias con niños.
"Queremos tener un recuerdo entrañable para las buenas personas que hoy no podrán estar con sus hijos celebrando estas fiestas", ha señalado su majestad, lo que ha generado los aplausos de una parte de los presentes.
"Más democracia"
Unos minutos antes, la concejal del distrito, Laia Ortiz (BComú), dirigiéndose a los niños, ha aprovechado la ocasión para lanzar su pulla política.
"Les hemos pedido también [a los Reyes Magos] una cosa muy especial: no solo que traigan todo aquello que pedís en las cartas, sino también un poco de ilusión para continuar aprendiendo, y también capacidad, paz, diálogo y más democracia", ha indicado desde el balcón.
Adoctrinamiento independentista
El adoctrinamiento independentista en las cabalgatas de los Reyes Magos no es siempre tan sutil. En Sabadell, por ejemplo, la carabana que acompaña a sus majestades llevaban regalos con lazos amarillos y peticiones de libertad para los activistas encarcelados.
Y en ocasiones anteriores, la ANC y Òmnium Cultural han repartido farolillos con la estelada, mientras que otros Reyes Magos han lanzado discursos abiertamente independentistas.