Los Mossos d'Esquadra han imputado por dos delitos a un hombre que, presuntamente, sustrajo una estelada metálica gigante en el pueblo del expresidente catalán prófugo, Carles Puigdemont. La policía autonómica acusa al ciudadano de tipos penales de hurto y daños, aunque los agentes no han tomado acciones contra los independentistas que lo retuvieron al interceptarlo cargando la enseña de hierro en el maletero de su coche.
Según ha explicado un portavoz de los Mossos a este medio, el cuerpo había recibido la denuncia de un particular por los daños a una bandera metálica de gran tamaño colocada en la zona de RocaBandera, en el peñón de Puigdalí, en el municipio gerundense de Sant Aniol de Finestres, que colinda con Amer, localidad natal del expresident huido de la justicia a Waterloo (Bélgica). La policía recibió un segundo aviso ayer sobre las 18:30 horas, en la que una persona aseguraba estar retenida en el lugar por otra persona que se identificó como propietario del terreno, que es de titularidad privada.
Imputado por daños y hurto
Hasta el lugar acudió una patrulla de los Mossos, que se encontró con dos partes. Por un lado, con un grupo de secesionistas, entre ellos el dueño del terreno. Por el otro, una persona con un vehículo rojo que denunciaba que había sido retenida por los independentistas. Tras separar a las dos partes, la policía autonómica denunció al activista que había tumbado la gran bandera metálica. Preguntado sobre por qué no percibió ilícito penal alguno en la retención del hombre, una portavoz ha contestado que "no ha sido denunciada".
Fuentes cercanas al Club Atlètic Amer, responsable de colocar la enseña de gran tamaño en RocaBandera han confirmado que "ayer tuvieron la suerte de toparse con uno de los hombres que había desmontado la estructura el domingo". Era, supuestamente, uno de los miembros del autodenominado Equipo Mazinger, que destornilló la estelada metálica el domingo, 24 horas después de que fuese colocada por esta entidad deportiva. Los autores de la acción dejaron testigo gráfico de su acción en un vídeo muy comentado en las redes sociales.
Las redes los jalean
El desmontaje e intento de robo de la estelada de Amer, pueblo del que es oriundo el expresidente catalán prófugo --y en el que sus padres regentan una pastelería-- en ha provocado una reacción de odio en las redes sociales. Los secesionistas han reaccionado en tromba aplaudiendo la "emboscada" acometida por el pequeño grupo de activistas, que habrían interceptado al denunciado tras el aviso de unos excursionistas. El núcleo de separatistas lo habría esperado y retenido a la fuerza hasta la llegada de los Mossos.
Al parecer la secuencia de los hechos fue la siguiente: los activistas levantaron la estructura metálica el sábado. El montaje pesa más de 100 kilos y "vale mucho más de 400 euros", lo que justifica la imputación del individuo por parte de la policía catalán, según una portavoz del cuerpo. No obstante, la estructura fue tumbada al día siguiente, domingo 30 de diciembre. Tras ello, el propietario colocó una estelada de ropa esperando a que volvieran para quitarla. Cuando el denunciado lo hizo, se abalanzaron sobre él y lo entregaron a los agentes.