Valls vería una "incongruencia moral" un pacto de Cs con Vox

Manuel Valls, candidato a la alcaldía de Barcelona, ha valorado el pacto de gobierno entre el PP, Cs que ha permitido la entrada de Vox en la mesa del Parlamento andaluz. El ex primer ministro francés ha advertido que todos los posibles acuerdos de gobierno con el partido de Santi Abascal es "un error político y una incongruencia moral". 

"Pienso que siempre es mejor perder votos, o incluso el gobierno, que traicionar las propias convicciones y los valores democráticos", ha manifestado el aspirante a primer edil a la capital catalana.

Candidato independiente

En sus declaraciones, Valls ha querido destacar que desde su plataforma, VallsBCN2019, "siempre se ha mostrado partidario de que en España y en Cataluña se aborden pactos de Estado entre las fuerzas constitucionalistas".

También ha remarcado que es un candidato independiente y que se ha comprometido con "una propuesta de cambio ante todos los barceloneses para trabajar por una ciudad abierta, tolerante y respetuosa".

Alas al populismo

El candidato a la alcaldía de Barcelona ha apuntado que se debe marcar distancia con "los populistas de la izquierda, los separatistas y los ultras de la derecha más reaccionaria". Además, ha considerado que el acuerdo de gobierno en Andalucía potencia el discurso radical de Ada Colau y de los nacionalistas catalanes.

"La irrupción de la ultraderecha en las instituciones, a pesar de que responde al resultado de las urnas, es una mala noticia para España", ha declarado Valls.

No a los radicales

El ex primer ministro de Francia ha vuelto a cargar duramente contra Vox que ha tildado de "radicales" y ha reiterado que no aceptará en su plataforma "a nadie que dé legitimidad a estos grupos", en referencia al partido de Abascal.

Finalmente, ha valorado que el PSOE-A debería plantearse abstenerse en la votación "para dejar gobernar a PP y a Ciudadanos", y evitar así crear "sospechas de que con su oposición hace el juego a la extrema derecha". Valls ha considerado que el programa de gobierno acordado en Andalucía lleva claramente una marca progresista.