La sentencia que condena a Artur Mas y otros nueve miembros de su gobierno por organizar la consulta del 9-N ha encendido los ánimos de los dirigentes de la Generalitat. Su presidente, Quim Torra, ha reaccionado con indignación al hecho de que tengan que devolver los casi cinco millones de euros que costó llevarla a cabo.
"El espíritu de venganza del Estado es insaciable. Los condenaron por el 9-N y ahora quieren quitarles el patrimonio. Todo el apoyo el presidente Mas, a Joana Ortega, a Francesc Homs y a Irene Rigau. No os dejaremos solos", ha comentado Torra a través de su perfil de Twitter.
Puigdemont acusa a Sánchez
El Tribunal de Cuentas ha declarado a Mas y al resto de sus compañeros que organizaron la votación del 9 de noviembre de 2014 como responsables contables directos de los gastos de fondos públicos que costó.
El expresidente huido Carles Puigdemont también se ha mostrado molesto, y ha aprovechado la decisión judicial para cargar contra el jefe del Ejecutivo, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez: "Los 'gestos de Sánchez' se parecen mucho a los 'gestos de Rajoy'. Un abuso y una arbitrariedad indigna", explica a través de sus redes sociales. El líder posconvergente recuerda que la sentencia se ha producido "el mismo día que promueven al candidato del PP a presidir" el Consejo Superior del Poder Judicial (CGPJ), en alusión a Manuel Marchena, sustituto de Carlos Lesmes.