El presidente de PDeCAT, David Bonvehí, asegura que su partido no va a desaparecer, a pesar de la irrupción de La Crida Nacional, creada por Carles Puigdemont, a quien expresa “lealtad absoluta”. No obstante, precisa que el expresidente “no controla el día a día” de PDeCAT.
En una entrevista en el programa Converses de COPE Catalunya, ha reiterado la negativa de su formación a apoyar los presupuestos generales del Estado. La decisión “viene de una decepción. Permitimos que Sánchez fuera presidente a cambio de nada, solo pedíamos comprensión con el problema catalán. No ha sido así respecto a la situación de presos y exiliados”. Ha precisado que el líder socialista “es una persona demócrata, no es PP, pero pensábamos que instaría a la Fiscalía a actuar de forma diferente”. Según el neoconvergente, PDeCAT no tiene capacidad para hacer caer a Sánchez, al que están dispuestos a apoyar en leyes sectoriales y propuestas que beneficien a los catalanes. “No nos aliaremos con PP y Ciudadanos para hacer caer a Sánchez”, ha dicho.
Necesidad de un gobierno estable
Asume que, si no hay nuevos presupuestos del Estado, difícilmente los habrá en Cataluña, aunque expresado su deseo de que los comunes y el PSC apoyen las cuentas catalanas. Considera que es necesario un gobierno estable, y éste pasa por la actual coalición que forman Junts per Catalunya y ERC, “no un tripartito”.
Respecto a las elecciones municipales, ha afirmado que la marca “tiene que ser Junts per Catalunya”, aunque en cada municipio se podrá añadir “una marca comercial”. En Barcelona, defiende a Neus Munté como candidata de PDeCAT, aunque ha recordado que su partido está abierto a una lista conjunta y a ceder el primer puesto a otra formación. “He intentado convencer a ERC, pero no ha sido posible”, ha dicho.
"No nos vamos a inmolar"
A pesar de la creación de la Crida Nacional, asegura que PDeCAT “no desaparecerá y se mantendrá como espacio ideológico. No se va a disolver ni a inmolar. Tenemos 14.000 asociados que piden más visibilidad”. Al respecto, ha dicho que “tenemos una lealtad absoluta a Carles Puigdemont, pero él no controla el día a día”.
Cree que la Crida “no es un partido, es un movimiento. Y cuando se acabe, estará PDeCAT y su apuesta ideológica”.
El presidente de la formación, heredera de CDC, se niega a escoger entre Artur Mas y Puigdemont. Respecto al proceso independentista, considera que lo hechos ocurridos después del referéndum del 1-O han demostrado que “no escogieron las vías más correctas”. Cree que la solución no pasa por “la desobediencia constante” de la CUP ni por “el posibilismo” de ERC”, sino por vías internacionales y también de diálogo con el Estado español.
David Bonvehí destaca el papel de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) en el avance soberanista, pero cree que se deberían de redefinir su papel. “Pido unidad estratégica y que la ANC no acaba de afinar cuando propone listas municipales