El presidente de la Generalitat, Quim Torra, se reunió el pasado mes de agosto con responsables de los autodenominados comités de defensa de la república (CDR) para fijar una estrategia común.
Torra les pidió dos cosas: moderación durante la celebración de la Diada y las conmemoraciones del primer aniversario del referéndum ilegal del 1-O, y apoyo en las movilizaciones previstas si las sentencias de los líderes independentistas presos es condenatoria.
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La cumbre no tuvo lugar en la Generalitat ni en dependencias oficiales, sino que habría sido el propio Torra quien se desplazó en su vehículo para verse con miembros de los CDR, según publica este martes El Mundo.
El president de la Generalitat ya había sido noticia en los últimos días por la difusión de un vídeo en el que se le ve pidiendo a los CDR que actúen cuando se conozcan las sentencias del procés.
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De hecho, Torra ya tenía previsto reunirse con miembros de los CDR después de la manifestación del pasado 1 de octubre, cuando ésta llegase ante el Parlament. Una de las convocatorias preveía concentrarse ante lo que habían sido los colegios electorales, y llevar desde allí urnas hasta la Cámara.
Sin embargo, el presidente de la Generalitat cambió finalmente sus planes y no los recibió, a raíz de los enfrentamientos entre algunos independentistas radicales y los agentes de los Mossos d'Esquadra del sábado anterior durante una manifestación de la asociación policial Jusapol.