El independentismo ha vivido este martes otra jornada de movilización este 11S. La Diada que marca el inicio de un curso político en el que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha hecho una llamada a una “movilización masiva” y constante hasta llegar a la implementación de la república catalana. En el mismo día, la Comisión Europea ha echado un jarro de agua fría a esta estrategia política al indicar que no se debe gobernar sólo por los partidarios de la secesión.
“Hoy había un millón de personas en la calle, pero también debemos tener en cuenta los millones que no se han manifestado”, ha afirmado el portavoz del Ejecutivo comunitario, Margaritis Schinas, en un encuentro con prensa española en Estrasburgo. Además, ha remarcado que es “de sobras conocida” la opinión oficial que se tiene del conflicto político catalán. Considera la gobernabilidad de Cataluña como un asunto interno de España.
Espaldarazo del Consejo de Europa
No ha sido el único que dirimido en contra de los planes de la Generalitat en el 11S. También desde la Alsacia, y en el marco de un encuentro con el ministro de Exteriores, Josep Borrell, el Consejo de Europa ha dado un espaldarazo al Gobierno frente a los independentistas. El secretario general de la institución, Thorbjorn Jagland, ha defendido el “orden constitucional” como el máximo garante de la unidad de un país.
“Hemos visto muchos casos en Europa de que si no se respeta la Constitución, muy pronto o en algún momento se acaba con grandes problemas, con un desastre”, ha indicado en una rueda de prensa. El ex primer ministro noruego ha mantenido que es “muy importante” que las vías de resolución del conflicto político pasen por un respeto a la Carta Magna. Y apunta a que “un cambio de la Constitución, si es necesario, debe hacerse de forma constitucional”.
Apoyo a la justicia española
También ha subrayado que no existen dudas en la Unión Europea sobre el funcionamiento democrático en España y ha defendido el buen hacer y la independencia de la justicia del país. Otro golpe a la hoja de ruta independentista, que pasa por acudir al Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo para denunciar el trato que han recibido los políticos secesionistas. Según su relato, se han erosionado cuestiones fundamentales en el marco de la causa contra el referéndum.
Jagland deja claro que tienen todo su derecho de acudir a esta sala, aunque se ha mostrado poco optimista en que la causa prospere.
Prisión provisional de los independentistas
Todo ello, en el mismo día en que Borrell ha expresado en una entrevista en BBC que, desde un punto de vista personal, es partidario de la excarcelación de los políticos independentistas que están en prisión provisional hasta que no exista una sentencia firme. Considera que se hay otras medidas cautelares que se podrían haber aplicado de forma igualmente eficientes sin tener que recurrir a la reclusión. Aunque remarca su respeto a la independencia judicial.
Desde su entorno apuntan a que no es la primera ocasión en que hace declaraciones públicas en este sentido, aunque hasta ahora no habían transcendido en su etapa como ministro. Asimismo, explican que la entrevista en la que ha realizado esta declaración fue gravada el sábado pasado. Por lo que intentan descargar la relación de que salga a la luz con la Diada.
Diálogo con Torra
Más allá de la apreciación de Borrell, el Gobierno mantiene que la crisis en Cataluña es política y que la resolución pasa por la fórmula de “diálogo, diálogo y diálogo” a la que ha hecho referencia en varias ocasiones el presidente, Pedro Sánchez.
En Europa, toda la atención política está puesta en el contenido del discurso sobre el estado de la Unión que tendrá lugar este miércoles, el último que realiza Jean Claude Juncker en su mandato y que abordará cuestiones tan claves como la política de inmigración; y en el futuro de Hungría. Se realizará una votación más simbólica que efectiva sobre la falta de respeto a los valores fundamentales de los 28 en que por primera vez el Partido Popular ha dado libertad de voto a sus eurodiputados. Cataluña, tal y como ha remarcado Schinas, no está ni se espera que esté en el corto plazo en la agenda de la Comisión.