Pedro Sánchez ha pasado hoy de puntillas sobre la cuestión territorial para sacar pecho de las "políticas sociales" del Gobierno que encabeza. El jefe del Ejecutivo ha eludido el espinoso tema catalán para desgranar una batería de medidas vinculadas al estado del bienestar en el balance de sus primeros 100 días en el Palacio de la Moncloa.
Lo ha hecho el presidente del Gobierno en la Fiesta de la Rosa en Oviedo (Asturias), desde donde ha insistido que el proyecto de los socialistas "es una transformación del país hasta 2030". Con ello, Sánchez ha tratado de acallar las voces que ven inestabilidad en su Gobierno, que depende de los votos de nacionalistas vascos y catalanes en el Congreso de Diputados, y de quitar hierro los rumores sobre elecciones generales anticipadas.
"Revertir los recortes"
El jefe del Ejecutivo ha avanzado que su equipo, que ha descrito como "feminista", trabajará para "revertir los recortes en educación que hizo el anterior gobierno", en referencia al Partido Popular (PP). Asimismo, Sánchez ha asegurado que su Gobierno tratará de "apostar por las políticas activas de empleo, para que nadie se quede atrás, proteger la sanidad pública, la 'joya de la corona' del estado del bienestar y de hacer políticas para cuidar el medio ambiente".
En este sentido y para apuntalar algunas de las promesas, el líder del PSOE ha asegurado que su formación "era la única capaz de pactar la revalorización de las pensiones, que es lo que hemos hecho. Somos los únicos que podemos garantizar prestaciones dignas". Asimismo, el presidente del Gobierno ha avisado que impulsará una política migratoria "que proteja los derechos de las personas", tras episodios contradictorios como la llegada del Aquarius o los saltos a las vallas fronterizas en Ceuta.
"No lo vamos a poder hacer todo"
Sánchez, que ha avisado de que su gobierno "no es por accidente, como piensan algunos, no es un paréntesis para que vuelvan después a gobernar los conservadores" no lo podrá hacer todo. "No habrá consenso para derogar la Reforma Laboral, pero sí para cambiar algunos de los artículos más lesivos del Estatuto de los Trabajadores, los que permiten la subcontratación. No será posible pactar una política común migratoria en la Unión Europea, pero España será vanguardia en una intervención que respete los derechos en este campo", ha enumerado a modo de ejemplo.
A dos días de la Diada de Cataluña, el jefe del Ejecutivo ha evitado referirse a la cuestión catalana, pero sí ha citado en diversas ocasiones la palabra "diálogo" y ha prometido que "reformará el sistema de financiación para todas las comunidades autónomas y los ayuntamientos".