El Gobierno ha anunciado que recurrirá el decreto de la Generalitat de Cataluña para reabrir las embajadas catalanas en varios países europeos. El recurso contencioso-administrativo será presentado por el Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación (MAUC), desde el que alegan que el Govern catalán “no ha cumplido las condiciones que establece la legislación vigente” en materia de creación de delegaciones autonómicas fuera de las fronteras españolas.
Este es el segundo recurso que el Gobierno de Pedro Sánchez ha abierto contra las medidas tomadas por la Generalitat para reavivar la llama del independentismo desde la Administración e instituciones dependientes. La primera fue en junio, cuando recurrió la moción aprobada en el parlamento catalán que continuaba la senda secesionista de la resolución de noviembre de 2015.
Aviso de 24 horas
La Ley 2/2014 de Acción y del Servicio Exterior del Estado que regula la creación de delegaciones de las comunidades autónomas en el exterior establece que, antes de ser abiertas, los territorios “deberán comunicar este hecho al Gobierno de España”. La idea de esta comunicación es que el Ministerio de Exteriores proceda a informar sobre “la adecuación de la propuesta a las directrices, fines y objetivos de la Política Exterior”. Es decir, que la actividad de las denominadas embajadas apoyen el principio de "unidad de acción en el exterior”.
Exteriores ha explicado que las delegaciones catalanas se crearon "con sólo 24 horas de antelación a la adopción del decreto de creación”, un hecho que imposibilitaba al Ministerio emitir estos informes.
Cerradas con el 155
La Generalitat de Catalunya esgrimió como argumento para poner en marcha estas sedes que “en realidad, no estaba abriendo” ninguna delegación sino “reabriendo” las que el Gobierno cerró al aplicar el artículo 155.
Sin embargo, el Ministerio ha apuntalado que en la creación de las primeras delegaciones autonómicas tampoco se cumplieron los trámites legales, por lo que el Ejecutivo de Mariano Rajoy interpuso los correspondientes recursos contencioso-administrativos, que fueron archivados una vez entró en vigor el 155.
"Caso omiso" de las advertencias
La actitud mostrada por la Generalitat deja "claro" que no busca ajustarse a la legalidad y que la administración hace "caso omiso a las reiteradas advertencias que se le han hecho al respecto", asegura el Ministerio. Asimismo, desde esta institución lamentan que deban emprender acciones de este tipo para solucionar el suceso, pero aseguran que no han tenido "otra opción" para preservar la legalidad.
Exteriores subraya que "no cuestiona la facultad del Gobierno de la Generalitat de establecer delegaciones en el exterior para el ejercicio, dentro del ámbito de sus competencias, de actividades con relevancia exterior, pero la creación de dichas delegaciones debe ajustarse a lo establecido por la Ley de la Acción y del Servicio Exterior del Estado".