Ada Colau considera que Barcelona “no tiene problemas graves de seguridad”. Lo ha dicho este martes en una entrevista en RAC1, en la que ha admitido que sí hay “pequeña delincuencia” en la capital catalana y que es “necesario” aumentar la presencia policial para dar un “mensaje de tolerancia cero” ante los hurtos. La alcaldesa de Barcelona ha asegurado que la principal prioridad de la ciudad es otra: la vivienda.
En el sector inmobiliario “se puede hacer negocio, pero no desorbitado y descontrolado”. Para frenar la subida de los precios de la vivienda en las grandes ciudades, como ocurre en Barcelona, Colau ha emplazado a Pedro Sánchez en hacerlo una de sus políticas prioritarias: “Deben impedirse las subidas abusivas del alquiler y que se alargue el periodo mínimo de los contratos”.
A nivel municipal, ha recordado las medidas sobre vivienda social que ha impulsado el ayuntamiento. Con esta, se prevén incorporar 300 viviendas asequibles al año: “Yo quiero una ciudad equilibrada, donde haya vecinos de todas las capacidades económicas en todos los barrios”. De las nuevas promociones que se impulsen, un 30% se destinará a vivienda social.
Más de 3.000 solicitantes de asilo
Colau también se ha referido a la llegada de los migrantes que viajaban a bordo del barco Aquarius --algunos de los cuales irán a Barcelona-- y en los refugiados que llegan a la capital catalana de forma frecuente. En el primer trimestre de 2018, el número de personas que han pedido asilo en la capital catalana ha aumentado de forma acusada: mientras que en todo 2017 hubo unas 4.000, los tres primeros meses de este año se superaron las 3.000.
“La ciudad ha estado preparada para acogerlos, hacemos un esfuerzo y estamos dispuestos a corresponsabilizarnos, pero necesitamos una política seria al respecto”, ha avisado. De momento, el ayuntamiento ha destinado seis millones de euros a la acogida de refugiados, un dinero que el “Estado nunca nos ha pagado”.
El top manta
Sobre los solicitantes de asilo, ha asegurado que las casuísticas son diversas y su actividad mientras esperan a que se resuelva la petición, también. “Están desde los que van a hacer de temporeros en el campo hasta la gente que busca trabajos precarios y los que tienen familiares o amigos y se alojan con ellos”, ha dicho. Para solucionarlo, ve una solución: “Cambiar una Ley de Extranjería que es racista”.
Esto también serviría, cree, para abordar el fenómeno del top manta y “terminar con la venta ilegal”. Colau propone permisos de trabajo temporales, para que “puedan pagar impuestos y ganarse la vida”. La alcaldesa de Barcelona indica que existe una tarjeta de vecindad para que los recién llegados puedan acceder a servicios mínimos: “Son nuestros vecinos y vecinas”.
Los “gestos” de Sánchez
En cuanto al nuevo Gobierno de Pedro Sánchez, Colau valora los “gestos positivos” que ha tenido. Como ejemplo de ellos, ha puesto la cantidad de mujeres del Ejecutivo y la acogida del Aquarius: “Ha mostrado un cambio claro con respecto a las políticas autoritarias del PP”. Sin embargo, le ha pedido “políticas serias” que concreten estos gestos.
Otro de los gestos que ha tenido el líder del PSOE ha sido con Cataluña, al mostrar su voluntad de diálogo con el nuevo Govern. Sin embargo, Colau considera que “no habrá normalidad ni condiciones normales para el diálogo hasta que hayan salido los presos de la cárcel”.