La Fiscalía lo tiene claro y lo ha situado como cuestión prioritaria. Tolerancia cero ante la posible comisión de nuevas (o reiteradas) conductas tendentes a dinamitar la unidad del Estado. La fuentes del Ministerio Público consultadas por este medio aseguran que la alerta es máxima. Tanto en la institución estatal como en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC).
El primer discurso de Quim Torra ante el Parlament no ha ayudado a templar la situación. De hecho, los mismos interlocutores afirman que las alarmas se dispararon “tras escuchar las palabras del candidato a la presidencia de la Generalitat”.
Alerta sin sorpresas
Indican que no se han sorprendido ni por el tono ni por el contenido de la intervención del diputado de JxCat desingado por Carles Puigdemont. Afirman que son sabedores del perfil ideológico radical del exresponsable del Born Centre Cultural.
Reputados miembros del Ministerio Público han empezado a analizar con lupa algunas de las expresiones y de los anuncios efectuados por Torra su alocución ante la Cámara catalana.
Reiteración criminal
Entre ellas, las menciones a “ejecutar el mandato de la urnas del 1-O”, la jornada del referéndum que se consideró inconstitucional y que fue prohibido expresamente por el TSJC. Sus resultados son antijurídicos por este motivo.
A la Fiscalía tampoco le ha pasado por alto el hecho de que Torra anuncie la recuperación de las leyes de transitoriedad “como vehículos para construir la nueva república”. Los textos y las disposiciones que les acompañan fueron recurriros y también declarados ilegales por el Tribunal Constitucional.
Actuación sin complejos
Llevará al extremo la aplicación del mandato normativo y del cometido constitucional que la ley otorga al Ministerio Público para a ser el baluarte de la legalidad. “Ya se actuó sin complejos en los casos precedentes. Ahora, no va a ser menos”, sentencian.