Ni el Tribunal Constitucional ni el Consejo de Garantías Estatutarias ni los letrados del Parlament han impedido que los independentistas impongan su rodillo para aprobar la reforma de la ley de presidencia y del Govern. La que permite investir a distancia a Carles Puigdemont. El Gobierno ya ha anunciado que impugnará esa iniciativa. La proposición de ley se ha aprobado por 70 vots a favor (JxCat, ERC i CUP) y 64 en contra (Cs, PSC-Units, CatECP i PPC)
La Cámara catalana, tal como estaba previsto, ha aprobado hoy esos cambios legales en lectura única, es decir, por la vía de urgencia y con el rechazo de la oposición. El debate se ha producido un día antes de que Puigdemont se reúna con su grupo parlamentario, Junts per Catalunya, en Berlín. Se espera que el expresidente tome una decisión respecto al próximo candidato.
Ante las presiones recibidas para formar gobierno, crece la hipótesis de un presidenciable provisional. Pero nada hay decidido y la última palabra la tiene el propio Puigdemont, a quien la CUP, la Assemblea Nacional Catalana (ANC) y algunos dirigentes de JxCAT ven como el único candidato legítimo. La Justicia ya ha advertido de que no puede ser ungido, por lo que esta pretensión abocaría a unas elecciones. Los independentistas tienen de plazo hasta el 22 de mayo para impedirlas.
El debate ha comenzado con intervenciones previas de la oposición expresando su indignación por la vía exprés utilizada, lo que no ha impedido que los independentistas forzaran el trámite por la vía de urgencia.
Cs: "Volvemos a los días más negros"
“Volvemos a los día 6 y 7 de septiembre, a los días más negros de este Parlament”, ha dicho la líder catalana de Ciudadanos, Inés Arrimadas, en alusión a las jornada en las que se aprobaron las leyes del referéndum y de transitoriedad, obviando las instrucciones del TC, del Consejo de Garantías y de los letrados de la Cámara catalana. Según Arrimadas, la ley “pretende la impunidad de quienes están fugados, es una auténtica aberración que solo se aplicará en la república imaginaria de Puigdemont”.
JxCAT y ERC: "Evidenciar un régimen no democrático"
Albert Batet, diputado de Junts per Catalunya, ha recordado que hay avales del propio TC para proceder por la vía de urgencia y que el Congreso ha utilizado este procedimiento exprés en varias ocasiones.
Por parte de ERC, Antoni Castellà ha recordado el carácter consultivo y “no preceptivo” del Consejo de Garantías. Y ha admitido que la proposición de ley es para evidenciar que “el Estado no aceptó el resultado del 21D y que vivimos en un régimen que no es democrático. Un Estado ‘apalizó’ a los catalanes el 1-O”.
PSC: "Ustedes descarrilaron la anterior legislatura"
El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, se ha preguntado por qué aprobar una ley que no se aplicará y ha avisado de que la legislatura anterior “descarriló” por incumplir las resoluciones judiciales. “Nos lo dice el Consejo de Garantías, no Madrid”, ha dicho. “No se puede gobernar Cataluña desde fuera, con eso sería suficiente para rechazar la reforma”, ha dicho el socialista, quien ha asegurado que los independentistas “tienen derecho a gobernar, pero no a desvirtuar las instituciones catalanas”.
Catalunya en Comú: "Hacen cosas que no sirven para nada"
El presidente del grupo parlamentario de Catalunya en Comú, Xavier Domènech, ha calificado de “debate pantalla” la aprobación de una ley a la medida de un candidato “no viable”. “Algún día –ha añadido—tendrán que explicar por qué hacen cosas que no sirven para nada”. Doménech ha reprochado a JxCAT que se arrogan el derecho a controlar el tiempo del pueblo de Cataluña solo con 34 diputados. Es dramático que ustedes no sepan qué hacer, no tienen credibilidad”.
CUP: "No a un gobierno de obediencia autonómica"
La diputada de la CUP, María Sirvent, ha dicho que la lectura única es perfectamente legal, aunque ha rechazado su abuso. No obstante, ha apoyado la reforma porque “los poderes del Estado, mediáticos y judiciales han intervenido esta Cámara y formando un gobierno de obediencia autonómica no iremos a ningún sitio”.
PP: "Al servicio de un fugado"
El diputado del PP, Santi Rodríguez, ha asegurado que la reforma legal no está al servicio del ciudadano, “sino al servicio de una única persona, que es Puigdemont, un fugado de la Justicia”.