El pleno de investidura ya tiene fecha. Será el próximo lunes, 12 de marzo, a las 10.00 horas. Ese día, el Parlament votará si Jordi Sànchez, el exlíder de la ANC y número dos de Junts per Catalunya, se convierte en el próximo presidente de la Generalitat. El presidente de la Cámara catalana, Roger Torrent, lo propuso el lunes como candidato tras una nueva ronda de contactos con los grupos parlamentarios.
La fecha, que ya había sido comunicada en privado a los líderes políticos por Torrent, ha trascendido precisamente porque los abogados de Sànchez la han incluido en su escrito. Su difusión ha sorprendido a los políticos.
Ésta es la opción que propuso Carles Puigdemont después de dar un paso al lado ante la imposibilidad de ser investido. Las reticencias iniciales de ERC a la investidura de Sànchez --al considerar que el candidato legítimo tendría que ser Oriol Junqueras, el exvicepresidente--, dejaron paso a un acuerdo entre los republicanos y JxCat.
Pide la libertad
La defensa de Sànchez ha presentado este martes un escrito ante el Tribunal Supremo y otro en el Constitucional en los que solicita la libertad de su cliente para poder asistir al debate de investidura. De no concedérsele la libertad, los letrados piden medidas para que pueda ser investido presidente. No es la primera vez que Sànchez pide la libertad, que el juez del TS Pablo Llarena siempre le ha denegado.
La solicitud no es "sólo porque hayan decaído en este tiempo las razones que avalaron en su momento la prisión, sino también porque ésta sería, sin ninguna duda, la manera más adecuada de garantizar no sólo el pleno respeto a su presunción de inocencia, a sus derechos políticos y a los derechos de quienes le han elegido", según el texto.
Sin apoyo de la CUP
El partido que ha anunciado que se abstendrá en la votación es la CUP. Los antisistema aseguran que sus cuatro diputados no darán apoyo a una candidatura autonomista, cuya base no sea "hacer la república". Esto podría dificultar la investidura de Sànchez, que no obtendría la mayoría necesaria en la primera votación.
En el caso de ir a una segunda votación, la falta de los votos de Toni Comín y Carles Puigdemont, en Bélgica, también dejaría al candidato sin el apoyo necesario para ser investido president, ya que los 64 escaños que sumarían serían uno menos que los que tienen en conjunto Ciudadanos, PSC, CatComú y PP.
Éste es el segundo pleno de investidura que convoca Roger Torrent. El primero, con Puigdemont como candidato, no se llegó a celebrar. El presidente del Parlament lo pospuso sine die a la espera de que el Tribunal Constitucional confirmara que existían plenas garantías judrídicas.