El presidente del Parlament, Roger Torrent, ha propuesto al candidato de Junts per Catalunya y presidente de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) Jordi Sànchez como candidato para ser investido presidente de la Generalitat. Torrent ha anunciado esta decisión tras reunirse con los líderes de todos los grupos parlamentarios. Solo JxCAT ha dado el paso y ha presentado candidato, aunque hoy por hoy, no tiene asegurada la mayoría ni siquiera en segunda vuelta, ya que la CUP ha avanzado que se abstendrá.
El presidente de la Cámara catalana no ha fijado fecha para el pleno de investidura. No estaba obligado a hacerlo hoy mismo, pero Junts per Catalunya ha pedido tiempo para cerrar un acuerdo con la CUP. Se trata del segundo intento de que convocar una sesión de investidura, después de que el pasado 30 de enero, decidiera aplazar el Pleno ante la falta de garantías para investir a Carles Puigdemont. La situación de prófugo del cabeza de lista de Junts per Catalunya, que es la formación independentista que más escaños obtuvo en las elecciones del 21D, complicaba la situación, dado que el magistrado del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, había prohibido a Puigdemont ser investido a distancia. Y según Torrent, era necesario evitar consecuencias penales para los diputados.
Desobediencia
Ahora es Sánchez quien, tras la renuncia de Puigdemont, toma el relevo. Pero su condición de encarcelado tampoco le hace viable como candidato. Esquerra había expresado su rechazo, aunque luego se desdijo. Por su parte, los antisistema celebraron un cónclave este fin de semana en el que anunciaron que se abstendrían en la votación. Hoy, en su reunión con Torrent (ERC), lanzaron un desafío a la Mesa del Parlament: que desobedezca al Supremo y permita votar a Puigdemont y el exconsejero Toni Comín. Solo así apoyará al candidato de JxCAT. Lo contrario supone, según los cupaires, un acatamiento al "Estado represor".
En definitiva, Torrent ha hecho oficial la propuesta de investidura de Sánchez, que no tiene mayoría asegurada. Posiblemente convoque en Pleno. Pero otra cosa es que se celebre.
A ese embrollo se ha unido en las últimas horas la propuesta de Joan Tardà (ERC) de tender puentes con los comunes y con el PSC para explorar una posible alianza de la izquierda.