Catalunya en Comú ha apelado al espíritu de izquierdas de ERC para recordarle que suman 36 diputados con la CUP y que la hipotética sucesora de Carles Puigdemont como presidenciable, Elsa Artadi, es “la discípula de Andreu Mas-Colell (exconsejero de Economía en el gobierno de Artur Mas, que protagonizó los recortes más salvajes de Cataluña, del Estado y de Europa”.
La portavoz parlamentaria de los comunes, Elisenda Alamany, ha avisado de que “tanto da Puigdemont como Artadi, no va de nombres, va de proyectos de país”.
Alamany no ve “una idea tan descabellada” que ERC y la CUP, que suman 36 diputados, puedan presentar un candidato. “Lamentamos que ERC esté supeditada en demasiadas coasiones a los designios de Junts per Catalunya y parece que no está en la vía de salir de esta supeditación”.
Se da la circunstancia de que, en la actualidad, los diputados que representan a los antisistema en el Parlament están más cercanos al sector de la izquierda que al más independentista. Un posible pacto de izquierdas que desbloquee la situación catalana es una de las posibilidades que siempre ha valorado la formación de Oriol Junqueras como alternativa a su pacto con la derecha de JxCAT. Un pacto que podría contar con el apoyo de los comunes. Encontrar un discurso que justifique ese viraje es el gran reto de los republicanos.