"La economía colaborativa no es lo uno ni lo otro". Esta es la tesis que ha defendido hoy lunes, 29 de enero, el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, en una conferencia en el Círculo Financiero de La Caixa en Barcelona.
El titular del departamento desde noviembre de 2016 ha abogado por "regular" las plataformas digitales para que éstas se conviertan en "óptimas" para el mercado. Bajo su punto de vista, estas empresas son al final conectores de "una demanda que se movía vía mayoristas de forma atomizada".
"Imaginemos que uno tiene una segunda residencia en el Pirineo que apenas usa unos meses. Si se alquila mediante una plataforma de persona a persona, me parece bien. Moviliza un recurso y lo incorpora al mercado", ha aclarado Nadal.
"Lo que no podemos tolerar --ha continuado-- es que los portales se conviertan en trampolines para impulsar el fraude fiscal. Tienen que asemejarse en seguridad al turismo convencional. Y en ello trabaja al Gobierno".
"Hay destinos turísticos obsoletos"
Este es, precisamente, uno de los retos que ha citado el exjefe de la Oficina Económica del Gobierno (2011-2016) en su charla, que llevaba como título La estrategia para un modelo sostenible.
Ante un auditorio repleto de altos directivos de empresas, entre los que destacaban el propio presidente de la Fundación Bancaria La Caixa, Isidro Fainé y el presidente de la Societat Econòmica Barcelonesa d'Amics del País, Miquel Roca, amén del expresident de la Generalitat, José Montilla, Nadal ha desgranado los dos principales retos para que el turismo nacional sea sostenible.
"Uno, hay destinos obsoletos en España. Que funcionaron muy bien en el pasado, en los años 60, pero que necesitan una renovación. Hay iniciativas interesantes de ese tipo en Baleares, en Ibiza, y esos mapas de cambios son los que comparte el Gobierno", ha valorado.
"El otro es el reto digital. Nadie se creía hace unos años que llegaríamos a los 82 millones de turistas. Pues lo hemos hecho, y es normal que haya episodios de congestión en verano. Para ello creo que la gestión del big data nos ayudará a gestionar esos flujos: cuándo llegan los visitantes, qué visitan y qué compran".
"La factura de la luz no puede ser el cubo de las malas decisiones"
Otra de las materias abordadas por Nadal ha sido la energía, una de sus carteras y uno de los campos donde a menudo recibe críticas por su postura intervencionista. El ministro ha anunciado que continuará la regulación en este sector "porque beneficia a las propias empresas".
Bajo su punto de vista, "lo difícil no es regular, es hacerlo bien. Una eléctrica puede criticar que se aprueben más leyes, pero seguro que lo ve diferente cuando son primas a las renovables o concesiones de explotación en hidroeléctrica. Esto ocurrió hace poco", ha avisado.
En este sentido, el también diputado en el Congreso de Diputados ha avisado también a sus propias filas en el PP y a las del resto de partidos. "La factura de la luz no puede ser el cubo de determinadas decisiones políticas. Es una hipoteca que pagaremos en el futuro".
Ello, no obstante, no será óbice para que el Gobierno relaje los controles al autoconsumo eléctrico, que algunas empresas, asociaciones e individuos defienden como solución para el abaratamiento eléctrico. "Autoconsumir sale rentable porque pagas menos parte de la red que el resto de los consumidores. Genera un daño al resto. La última regulación de 2015 evita, precisamente, que la gente no aporte".
"España es una historia de éxito, pese a algunos"
El ponente también ha abordado los retos de la industria en España, la tercera pata de su departamento. Álvaro Nadal ha recordado que la media de longevidad de un ministro con su cartera "es de menos de tres años". A ello ha opuesto los "retos a largo plazo" para la manufactura nacional. "La competitividad ha llevado a España de ser un país pobre a los niveles de riqueza de la UE en sólo dos generaciones", ha recordado.
Para que ello continúe, el economista de formación ha subrayado que "se necesita trabajar en el binomio precios-calidad. Hay que cuidar los costes y no parar de innovar y buscar nuevos mercados: ello equilibra nuestra balanza comercial y evita el endeudamiento".
Nadal ha insistido en que España tiene más de 19 millones de empleados, "más que de 1975 a 1995, cuando se hicieron doce devaluaciones". Por ello, cree que la ocupación seguirá en su senda ascendiente si "los españoles están mejor preparados y hay acceso a la financiación".
Compartiendo mesa con los más altos directivos de Caixabank, Gonzalo Gortázar, consejero delegado, y Jordi Gual, presidente, el ministro ha concluido su discurso con una aseveración concluyente, en la víspera de la sesión de investidura en el Parlament. "España es una historia de éxito y lo seguirá siendo pese a que a algunos, ya sabemos a quien, le pese".