JxCat ha retirado del orden del día de la reunión de este martes de la Mesa del Parlament la solicitud del candidato a la presidencia de la Generalitat, Carles Puigdemont, de delegar el voto en el pleno de investidura.
El objetivo de la petición es impedir que el Gobierno o un grupo parlamentario impugnara la convocatoria de un pleno destinado a debatir la investidura de un diputado que se sabe con certeza que no estará presente, como demostraría el hecho de que hubiera delegado su voto.
Los demás huidos sí delegan
Así lo han explicado fuentes de la candidatura poco antes de la reunión de la Mesa, que deberá debatir ahora si acepta que el resto de diputados soberanistas que están en Bélgica sí puedan delegar su voto en un compañero de grupo de cara a la primera gran sesión de la legislatura catalana.
Pese a la decisión, las fuentes consultadas aseguran que no descartan nada y que "siempre están a tiempo" de presentar de nuevo la solicitud.
Decisión de la Mesa
La última decisión de todo ello la tiene la Mesa: cuatro de los siete miembros de este órgano son de JxCat y ERC, por lo que la decisión está en manos de estos dos grupos. Y, de momento, lo que ha hecho es dejar el debate de esta cuestión para más adelante.
Un informe de los letrados de la Cámara sostiene que esta delegación de voto de quienes están huidos sería contraria al reglamento del Parlament. Los mismos letrados esgrimen, en el caso de los presos, que la última decisión la tiene la Mesa, que podría entender que su ausencia es forzada, y por tanto asimilable a la de una enfermedad, algo que sí contempla el reglamento de la cámara.