Tabarnia, la antigua región que ocupaban Barcelona y Tarragona cuya hipotética independencia se ha convertido en un fenómeno viral, es el motor comercial de Cataluña. Lo demuestra el informe El comercio interprovincial catalán y la división territorial mostrada por el 21D, elaborado por el profesor de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) Carlos Llano, director técnico del proyecto C-intereg. Llano se hace eco del fenómeno Tabarnia y de los resultados electorales del 21D, donde el voto no independentista se impuso en Barcelona y Tarragona.
Principales exportaciones inter-provinciales de Cataluña al Resto de España
Pero también evidencia que de los 50 flujos comerciales interprovinciales más importantes que tienen origen en Cataluña, solo 4 corresponden a Girona y Lleida. Los datos avalan los argumentos de los defensores de Tabarnia, que a modo de sátira del victimismo secesionista critican el déficit fiscal que sufren Barcelona y Tarragona respecto al resto de Cataluña debido a un mayor potencia económica. “Existen dos zonas geográficas dentro de Cataluña, definidas en términos de un core industrial y de servicios formado por Barcelona-Tarragona versus una periferia más rural formada por Lleida-Girona”, afirma el estudio, que se puede consultar en este enlace.
El proyecto C-intereg
C-intereg es un proyecto centrado en el análisis del comercio interregional que arrancó en 2004 por iniciativa del Centro de Predicción Económica (Ceprede) y el patrocinio de ocho comunidades autónomas, entre las que se encuentra Cataluña. Ceprede nació en 1981 a instancias de un grupo de profesores de la UAM, la Cámara de Comercio e Industria de Madrid y la Fundación Universidad-Empresa. En el citado informe se demuestra que Barcelona es el principal origen de los flujos catalanes, con 55.186 millones, de los que el principal destino es Barcelona misma (30.013 millones), seguida del resto de España (20.996 millones), y en muy menor medida Tarragona, Lleida y Girona.
Según el informe, los flujos interprovinciales muestran “la existencia de una dualidad territorial importante dentro de Cataluña. Los datos no apuntan a la existencia de dos provincias industriales especialmente relacionadas entre sí --Barcelona y Tarragona-- frente a otras dos provincias periféricas de carácter más rural”. Añade que los flujos interprovinciales dentro de Cataluña apuntan a una gran provincia central, Barcelona, “que es la única capaz de generar una intensidad de flujos intraprovinciales realmente relevante”.
Gran dependencia del resto de España
Por otro lado, Barcelona, al igual que el resto de provincias catalanas, muestra una gran dependencia respecto de la demanda generada en el resto de España. También se observa la importancia de los flujos con origen en Tarragona, donde se confirma una gran concentración en el sector petro-químico --el informe analiza los flujos por sectores comerciales--, así como una gran orientación de las ventas hacia el resto de España, superior a los flujos destinados a las otras tres provincias catalanas. “Es conveniente recordar que Cataluña tiene el saldo positivo más elevado con el resto de España, y que se sustenta sobre los saldos muy positivos de Barcelona y, en menor medida, de Tarragona y Lleida, mientras que Girona presenta un saldo negativo”.
Las empresas ubicadas en Barcelona dependen mucho más de los pedidos que se generan en la propia Barcelona y el resto de España que de los que proceden del resto de provincias catalanas.
La relación de Tarragona con Zaragoza, Huesca, Castellón...
La siguiente provincia más importante es Tarragona, capaz de generar una media de 18.058 millones de euros al año, de los cuales, la inmensa mayoría tienen como destino el resto de España, y en muy menor medida la propia Tarragona. “Sus exportaciones a Barcelona son relativamente pequeñas. Menores aún son las que destina a Girona y Lleida, que resultan inferiores a las que envía a otras provincias no catalanas. En este sentido, Tarragona se muestra muy dependiente de la demanda del resto de España, reflejando una integración más profunda con provincias como Zaragoza, Huesca, Castellón o Valencia que con Lleida y Girona”.
Los flujos con origen en Girona y Lleida sumados (7.038 millones + 6.738 millones) no llegan al nivel de los generados en Tarragona (18.058 millones). Los principales flujos de exportación de Girona y Lleida tienen como destino al resto de España, con valores medios de 2.613 y 2.129 millones, respectivamente, superiores incluso a los que tienen consigo mismas, así como con Barcelona y Tarragona.