El ministro de Economía, Luis de Guindos, considera "de sentido común" que se vete la investidura telemática de Carles Puigdemont como presidente de la Generalitat y reclama volver a la normalidad con un ejecutivo que gobierne "en Cataluña, para Cataluña y desde Cataluña".
El ministro, que asiste esta noche a la entrega de los premios Empresa del Año, organizados por El Periódico y Banco Sabadell, considera imprescindible que Puigdemont esté presente en el Parlament para su investidura, tal y como indica el reglamento de esta institución y como sostiene también el informe jurídico que han elaborado los letrados de la cámara catalana.
Para Guindos es fundamental que Cataluña vuelva a la normalidad y eso solo será posible, ha advertido, cuando haya un nuevo Govern que se centre en los problemas reales de la ciudadanía y que aplique el Estatut y la Constitución, que "es lo que quiere el mundo económico y los inversores institucionales".
Los mercados descartan la independencia
En declaraciones a la prensa, ha asegurado que los mercados financieros dan por descontado que la vía unilateral de independencia "está cerrada" y que Cataluña va a "ir volviendo a esa normalidad" de forma paulatina, lo que ya se está traduciendo en una vuelta a la confianza en la economía española y catalana.
"Hoy, por ejemplo, la prima de riesgo de España estaba por debajo de los cien puntos básicos", ha explicado De Guindos, que ha recordado que este indicador tuvo un repunte después de la declaración unilateral de independencia del pasado 27 de octubre.
Fuga de empresas
Respecto a la marcha de empresas de Cataluña, el ministro ha subrayado que esta situación es consecuencia de "las políticas irresponsables" del anterior gobierno catalán, pero se ha mostrado convencido de que, si la comunidad recupera la normalidad política e institucional, las compañías volverán.
Luis de Guindos comparecerá mañana en la comisión de investigación del Congreso de los Diputados que está estudiando la crisis financiera y el rescate a la banca.
Ha comentado que en esta comparecencia recordará datos y hechos de hace seis años, aunque es muy importante, ha dicho, porque "en perspectiva podemos aprender de errores cometidos y no volver a repetirlos en el futuro".
El ministro de Economía ha remarcado asimismo la fortaleza del sistema financiero español: los bancos vuelven a dar crédito y "no hay ninguna duda" sobre su solvencia.