El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha condenado a la Generalitat a indemnizar al Ayuntamiento de Cornellà de Llobregat (Barcelona) por los impagos a las guarderías de este municipio. El tribunal condena al Govern a pagar las aportaciones correspondientes pendientes desde el curso 2011-2012 al curso 2014-2015, lo que equivale a 826.800 euros del primer curso y el equivalente a 1.300 euros por alumno por los otros tres cursos, más los intereses de demora.
Debido a los recortes aplicados por el Gobierno de Artur Mas, la Consejería de Enseñanza empezó a reducir sus ayudas para la educación de 0 a 3 años a partir de 2011, y pasó de los 1.800 euros anuales por niño a 1.600 primero, después a 1.300, y en 2014 las eliminó por completo. Esto hizo que los padres o los ayuntamientos tuvieran que asumir esta parte.
El Ayuntamiento de Cornellà presentó el recurso en 2014 en el que pedía 1.800 euros por cada niño y curso por la vigencia de la ley de 2004 de creación de guarderías y la de 2009 de Educació de Cataluña, mientras que la Generalitat pidió que no se la condenara a pagar los intereses. También alegó que, según el Estatuto, es competencia de los municipios el servicio de guarderías, y que la Diputación de Barcelona y los padres se hicieron cargo del dinero que había dejado de aportar el departamento.
La directora de Servicios de Enseñanza aportó un informe al TSJC en el que alegaba que los 45 millones previstos en 2014 para guarderías municipales se acabaron destinando a “un interés superior”.
Ahora el TSJC concluye que la Generalitat debe hacerse cargo de los compromisos contraídos, como de los más de 825.000 euros de 2011, con los intereses correspondientes, y 1.300 euros por alumno por el resto de cursos.