El Museu de Lleida entrega una obra no reclamada al monasterio de Sijena
Una de las 44 piezas que se tenían que trasladar se ha extraviado y continúa su búsqueda en el Palacio Episcopal de la ciudad
11 diciembre, 2017 17:56Una de las 44 obras de Sijena que han llegado al monasterio proveniente del Museu de Lleida no está entre las reclamadas por Huesca. El museo ha facilitado a los técnicos del Gobierno aragonés otra pieza originaria al extraviarse una de las que requería.
Un lienzo del siglo XVIII, es la pieza reclamada judicialmente que se ha extraviado, y a cambio, el museo ha facilitado otra pieza de alabastro originaria del mismo cenobio.
“Se han llevado 44”
El director del Museu de Lleida, Josep Giralt, que dicho: "Tenían que recoger 44 piezas, ha habido una que no se ha localizado porque estaba en el Palacio episcopal, estamos buscándola, de todas maneras ellos se han acabado llevando 44".
"Hemos entregado una pieza más del inventario que tenía el Gobierno de Aragón, una pieza de alabastro que formaba parte de unos de los retablos del monasterio de Sijena que estaba en el almacén, que nosotros teníamos inventariado y que ellos no lo tenían consignado en la orden del juez", ha explicado Giralt .
"Como teníamos muy claro que ya que se llevaban todos los fragmentos de alabastro de Sijena, para nosotros no representaba nada que también se fuera ese fragmento, y hemos dejado constancia en acta", ha añadido, y ha advertido de que el día que el consorcio presente recurso ante el Tribunal Supremo reclamarán la nueva pieza entregada.
El conflicto no se acaba
El director ha asegurado que los técnicos del Museu de Lleida, han hecho lo que tenían que hacer aunque no les gustara, y ha asegurado que el conflicto no se ha acabado: "El 4 de enero continuaremos en el Supremo, y espero que el recurso de casación nos lleve a ganar el litigio de Sijena".
Para Giralt, "lo único penoso de esto es que hoy han sufrido las piezas, el patrimonio, los objetos", y ha recordado la opinión del museo y de la Xarxa de Museus d'Art de Catalunya de la importancia de no mover un patrimonio hasta existir sentencia firme.