Horas previas al pleno del Parlamento catalán en el que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, podría declarar la independencia unilateral de Cataluña, el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha querido marcar perfil frente a este desafío secesionista. Pero, sobre todo, frente al Gobierno liderado por Mariano Rajoy: “La prudencia es actuar”, ha dicho en referencia a la aplicación del artículo 155 para frenar “el golpe a la democracia” que pretende consumar el Gobierno catalán. 

El líder de la formación naranja ha mantenido un tono más severo que en otras ocasiones. Ha sido especialmente duro con la "inacción" de sus socios de Gobierno y ha afirmado que “hay que tener un gobierno valiente”. Se ha referido hasta en tres ocasiones al intento de golpe de Estado del 23-F de 1981 y a la lucha contra ETA para subrayar la encrucijada en que se encuentra ahora la democracia española: “No tenemos un sueño, tenemos una pesadilla. Es un día dramático para la historia de este país”, ha sostenido al empezar su discurso en el Foro Next de la Business School ante un auditorio copado por empresarios preocupados por la inestabilidad política, compañeros de partido como Juan Carlos Girauta o Begoña Villacís y algún exdirigente del PP crítico con Rajoy como Aleix Vidal Quadras

Elecciones

La mayor crítica de Rivera al Gobierno del PP es no haber tomado la iniciativa antes: “¿Alguien piensa que en Estados Unidos o Alemania, países federales, hubieran esperado a que se diera el golpe?”. Según el presidente de Ciudadanos el artículo 155 serviría para sacar a Puigdemont del Ejecutivo catalán, "poner urnas" y "seguridad en las calles de Barcelona”. “No podemos confiar la seguridad a los que están tramando un golpe”, ha espetado. Otra de las soluciones que ha destacado es la elaboración de una nueva Ley de Seguridad Nacional que equipare los salarios entre cuerpos policiales. 

Rivera también se ha centrado en los errores del referéndum ilegal del 1 de octubre: “El 1-O fue un cúmulo de errores por no prever las deslealtades de una cúpula policial política”. Y, más allá de "quitar competencias", considera que la solución pasa por “ganarles en las urnas”. En este sentido, su discurso ha tenido cierto aire de mitin electoral, pensando en las próximas elecciones catalanas.

Mirar hacia Europa

El líder de Ciudadanos también ha querido expulsar lo que en su opinión son complejos españoles, ajenos a otras naciones europeas. De forma retórica se ha preguntado cómo “una nación europea ha podido llegar hasta aquí después de 35 años de democracia”. El político barcelonés ha elevado el problema a nivel continental y comunitario: “El nacionalismo es el mayor adversario político que tiene ahora”. 

Rivera también se ha acordado del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y las apelaciones al diálogo del entorno de Podemos: “El diálogo fuera de la democracia es chantaje. Lo vimos con ETA y el 23-F. No lo aceptamos”. 

El líder de Ciudadanos se ha despedido con este guiño europeo y ha concluido su intervención en tres idiomas: “Cataluña és la meva terra, España mi país y Europa our future.