Terminó la primera reunión de mando único policial para coordinar la seguridad del 1 de octubre. El encuentro ha trascurrido con normalidad y corrección a pesar de la tensión del ambiente y a la ausencia del mayor de los Mossos d’Esquadra, Josep Lluís Trapero. La policía autonómica ha mostrado disciplina ante la Fiscalía, pero sigue apelando por vía política a que no les mande la Guardia Civil, sino la Junta de Seguridad de Cataluña, en la que está representado el Gobierno de la Generalitat.

La reunión ha durado 55 minutos. El primero en tomar la palabra ha sido el coronel Diego Pérez de los Cobos, quien ha situado los términos del encuentro con base en la circular 4/2017 de la Fiscalía Superior de Cataluña. La misma que establece un gabinete de coordinación conjunto policial para impedir el 1-O. La misma que rechaza el Govern y que acatan los Mossos a regañadientes.

Corrección

A continuación, ha tomado la palabra el considerado número tres de los Mossos, Ferran López, quien ha acudido en lugar de Trapero y ha comunicado a los allí presentes (De los Cobos; el responsable de la Guardia Civil en Cataluña, Ángel Gozalo, y el jefe de la Policía Nacional en Cataluña, Sebastián Trapote) el contenido de la misiva que el mayor envió al fiscal superior, José María Romero de Tejada, en la que se mostraba receptivo a cualquier coordinación pero en el marco de los acuerdos de la Junta de Seguridad de Cataluña.

Tanto la Guardia Civil como la Policía Nacional se han mostrado informados y a partir de ahí la reunión ha trascurrido en los cauces de la normalidad. Los Mossos niegan taxativamente haber abandonado la reunión y fuentes conocedoras de la misma hablan de un intercambio de educada corrección. Sin salidas de tono.