Silencio. Empresarios y ejecutivos catalanes han optado por el perfil bajo en un momento de máxima tensión política en Cataluña. La oleada de registros realizados por la Guardia Civil y la Policía Nacional sorprendió a muchas empresas en un momento en el que debían resolver una dicotomía: ¿debían dejar tiempo libre a sus empleados que les pidieran ir a votar el 1-O?
El sentido práctico se había impuesto en la mayoría de departamentos de recursos humanos consultados, aunque todos comentan la situación bajo la petición de anonimato. La conclusión a la que habían llegado era permitir la participación en el referéndum.
Los boicots de las últimas semanas que se han orquestado en las redes sociales a empresas presuntamente favorables o contrarias a la independencia hacían temer que trascendiera una negativa de un privado en este sentido. Mejor el perfil bajo.
Declaración de Foment
Sobre los registros, hablan poco. “Algún día tenían que llegar y ha sido ahora”, comentaba un ejecutivo próximo a la gran patronal catalana. La última declaración pública de Foment del Treball es la que hacía su presidente, Joaquim Gay de Montellà, pocas horas antes de que empezara el operativo policial en una entrevista.
Llamó al diálogo entre Barcelona y Madrid para acabar con el conflicto político en Cataluña. Unas palabras que han repetido los miembros de la organización consultados, que también se remitían a la declaración pública que hizo la CEOE. La junta directiva de la patronal alcanzó hace una semana, tras un debate complejo en la junta directiva, una resolución de apoyo a las medidas impulsadas por el Gobierno ante la escalada del procés. En línea con la declaración de la Cámara de Comercio de España, que se reivindica la defensa de la legalidad igual que se exige una solución política.
Encuentro en la Cámara de Comercio
La Cámara de Comercio de Barcelona decidió imponer la normalidad institucional y no suspender el encuentro empresarial con el conseller de Territori, Josep Rull, en el marco de una comida con empresarios. El político del PDeCAT mantuvo su voluntad de comparecer ante los ejecutivos y no se alteró el formato. En este escenario, el presidente de Pimec, Josep González, tildó de "desproporcionada" la actuación de la Guardia Civil.
"Apostamos por el diálogo y el entendimiento y no vamos por ese camino", añadió. La patronal de pymes catalana también pactó un posicionamiento público hace una semana para reclamar un referéndum legal y acordado. Petición que sus miembros mantienen en estos momentos como vía de solución al conflicto.
Impacto en la seguridad jurídica
Más allá de estos posicionamientos, el empresariado catalán muestra su preocupación por el impacto que tendrá el procés en la evolución económica tanto de España como de Cataluña. Recuerdan que las caóticas sesiones de desconexión en el Parlament lastraron la imagen de seguridad jurídica del territorio, y tampoco creen que las actuaciones de este miércoles hayan favorecido mucho a su recuperación a pesar de que existe consenso en que se ha cumplido con la ley.
"Nosotros estamos preocupados tanto por lo que vaya a pasar en los próximos días como lo que ocurra a partir del 2 de octubre". Afirman que ahora toca esperar a valorar la repercusiones del choque de trenes que ya se ha producido.