El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, consulta unos documentos en una imagen de archivo / EFE

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, consulta unos documentos en una imagen de archivo / EFE

Política

Los independentistas desoyen las advertencias y se conjuran para seguir con el 1-O

Puigdemont, Turull, Simó, Tardà y Sánchez contestan a Rajoy e insisten en el referéndum

2 septiembre, 2017 17:06

La historia se repite: Rajoy asegura que el referéndum del 1-O no se celebrará; los independentistas, afirman que sí. Las advertencias del Gobierno, que se prepara para afrontar el mes anterior a la consulta prevista, no asustan a los separatistas, que las desoyen y e insisten en el 1 de octubre.

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha reaccionado a través de Twitter con un escueto mensaje: “Hay en marcha una operación provocación. No caigamos. Nos quieren crispados y enfadados (como ellos) porque nos ven serenos y esperanzados!”.

También desde ERC han destinado unas palabras a Mariano Rajoy. Tanto la secretaria primera de la mesa del Parlament, Anna Simó, como el portavoz del partido en el Congreso, Joan Tardà, piensan que la respuesta es “democracia”. “Ganaremos este proceso con democracia y urnas, algo que tanto miedo da a algunos”, ha dicho Simó.

Tardà ha tildado la reacción del Estado a la situación de “autoritaria y no democrática”. Opina que el referéndum será “legal”, ya que se produciría “bajo el mandato democrático”. A lo que ha añadido: “Éste es el problema del Estado español; querer enfrentarse a la democracia es querer perder por goleada”.

“Ya hemos ganado”

El portavoz del Gobierno catalán y consejero de Presidencia, Jordi Turull, ha dicho que “si para el Estado la solución final es el tanque, ya hemos ganado”. Turull ha bromeado sobre el tema y ha añadido: “Si sacaran los tanques, nos han puesto tantos peajes que no van a pasar”.

Desde la Assemblea Nacional Catalana (ANC), Jordi Sánchez también ha hecho referencia a la “democracia” y ha dicho que el 1-O pone en juego si el Estado lo es o no. Votar el 1 de octubre, ha manifestado, es un “sueño hecho realidad”.