El Gobierno de Carles Puigdemont ha vuelto a aplazar, una vez más, la decisión de la compra de las urnas que todavía no tiene para la celebración del referéndum, a solo dos meses y medio de la votación para el proceso separatista catalán.
Lo ha anunciado el nuevo portavoz del Gobierno catalán, Jordi Turull, en la que ha sido su primera intervención en el cargo que hasta el viernes pasado ocupaba Neus Munté. “A partir de ahora, todo lo relacionado con el referéndum lo presentaremos cuando esté completado”, ha dicho. Y lo harán en el marco de la ley vigente, según ha subrayado.
Turull se ha referido a los "itinerarios" para hablar de las decisiones que tomará el Govern en el futuro, y ha dado a entender que quiere protegerse de las respuestas del Gobierno central. Por el momento, el único anuncio claro acerca de la compra de urnas es que se convocará, en los próximos días, una reunión para completar el proceso.
Gobierno en su conjunto
“Cuando lo tengamos, se lo explicaremos y ustedes tendrán toda la información”, es la frase que más ha repetido Turull a todas las preguntas de los medios, la mayoría relacionadas con la fecha de calendarización para la compra de las urnas. Y añadía que todas las cuestiones a las que se refiere tienen relación con “todo el Gobierno en su conjunto”.
El conseller de Presidencia ha esquivado todas las preguntas en torno a las incógnitas bajo el paraguas del presunto acoso del Gobierno central al que está sometida la Generalitat de Cataluña. “Cada día hay una noticia nueva de este acoso. ¡Qué largo se nos hará llegar al 1 de octubre!”, ha lamentado.
Guardar información
Ese es el motivo principal por el que el equipo de Gobierno de Carles Puigdemont ha decidido guardarse un as bajo la manga y no dar a conocer su estrategia para encarar la recta final del referéndum. “Hemos decidido que la administración de la información de temas tan importantes la gestionaremos nosotros en el momento que creamos que es mejor”. Y el objetivo principal, asegura, es que la gente vote y no será la ingenuidad de los dirigentes la que les haga pinchar.
Un despistado Turull (“Como es la primera vez, pido un poco de comprensión”, ha dicho a los medios) ha retomado el discurso que lanzó Puigdemont el pasado viernes sobre si es necesario preguntarse cómo se consiguen las urnas en otras elecciones.
La Guardia Civil y el NO-DO
En el marco del "acoso" del resto de España para con el territorio catalán, sostiene que a la Guardia Civil "solo le faltó la música del NO-DO" cuando se personó en el Teatre Nacional de Catalunya (TNC) para pedir información sobre el acto de la ley del referéndum de Junts pel Sí.
A la pregunta sobre dónde queda el principio de transparencia de la Generalitat, el conseller ha respondido que lo que realmente está en riesgo es la democracia. "¿No cree que a la gente le preocupa más dónde queda el derecho a la libertad de expresión?", ha espetado evitando contestar, una vez más.