Ha estado en el punto de mira de los independentistas y ahora deja claras sus posturas. El alcalde de Lleida y presidente del PSC, Àngel Ros, ha sostenido que las unilateralidades políticas "abonan el conflicto y amenazan la paz social", en una alusión al referéndum sobre la independencia previsto para el 1 de octubre. Un referéndum al que el Ayuntamiento de Lleida no cederá ningún tipo de infraestructura, tal como se ha decidido esta semana, lo que le ha valido duras críticas por parte de la órbita secesionista.
En un artículo en los periódicos Segre y La Mañana, Ros ha defendido que él votaría en un referéndum "fruto del diálogo y del pacto político", del mismo modo que ha dicho que el Ayuntamiento de Lleida colaboraría con un referéndum acordado.
Solo hay una legalidad
Ha asegurado que no pondrá en riesgo "el puesto de trabajo y el futuro personal y familiar de los profesionales" de su Ayuntamiento al participar en el referéndum previsto por el Govern y ha incidido en la idea de que sólo hay una única legalidad.
Ros considera que los postulados independentistas serían legítimos "siempre que la Constitución permita estas opciones" y ha apostado por un nuevo marco de relación entre Cataluña y España en forma de Estado federal.
Así, ha supeditado la solución a la "gran crisis institucional" entre el Gobierno y la Generalitat a dar voz a la ciudadanía para que ésta ratifique un modelo de relación que esté dentro de la ley.