Es la jefa de la oposición en un Parlamento catalán hipotecado por el proceso independentista. Inés Arrimadas (Jerez de la Frontera, 1981) es la líder de Ciudadanos en una plaza difícil para su partido, pero está convencida de que "una España reformada es la mejor alternativa al secesionismo".
-Una nueva Diada, y todo sigue igual en Cataluña.
-Llevamos muchos años con un tema que sabemos que no va a ninguna parte. Necesitamos llegar al final del camino para saber que esto no tiene salida. Tampoco ayuda que no haya todavía un Gobierno de España que se ponga a reformar este país y ponga en evidencia a [Carles] Puigdemont. Se debe dialogar por vías democráticas. Podemos hablar de todo, pero no de declarar la independencia y saltarse las leyes. Es muy complicado hablar en Cataluña de propuestas y alternativas, yo lo he intentado, pero parece que lo único importante es hablar del referéndum de independencia. Llegará la fecha de caducidad que ellos mismos se han puesto y se verá que no es posible, por lo que debemos estar preparados para ofrecer una alternativa.
-¿Cataluña es obstáculo en las negociaciones para formar Gobierno en España?
-¿Cuáles son?
-Queremos reformar España. Pero hay gente que pide la independencia y pasar más años hablando de un referéndum que no se va a hacer. Nosotros proponemos reformas básicas: de la Constitución, del sistema de financiación de las comunidades autónomas, de las prioridades en infraestructuras, de las mejoras sociales y del régimen de autónomos --Cataluña es la comunidad con más autónomos--. Y la eliminación de chiringuitos administrativos duplicados y de la despolitización de la justicia… Sin olvidar que, con el debate independentista, aquí nadie cuestiona la gestión de la Generalitat. Una España reformada es la mejor alternativa al secesionismo en Cataluña. Porque beneficia a todos, seas de derechas o de izquierdas, secesionista o no. Pero se requiere el consenso de los viejos partidos.
-Pero los sentimientos están ahí, se ha visto en la Diada…
-Los sentimientos son muy respetables y las políticas no deben ir dirigidas a cambiarlos. Hay muchas personas convencidas de que la independencia es lo mejor, pero no son mayoría. Están muy movilizadas, pero no son mayoría. Nosotros apelamos al sentido común y a hacer política. Hay que cumplir las leyes, pero también hacer reformas. No apostamos ni por la independencia ni por referendos ni por saltarse las leyes. Pero tampoco vamos a decir que aquí no pasa nada y que hay que dejar todo igual.
-¿Ve a Puigdemont capaz de declarar la independencia de forma unilateral?
-Puigdemont está siendo tremendamente irresponsable porque no va a poder cumplir lo que dice. Le hemos escuchado decir que en la Diada de 2017 ya habremos declarado la independencia. Eso no se lo cree ni él. Pero me preocupa que haya mucha gente que confía en él y podemos llegar a un punto de frustración. Hay que dar salidas políticas realistas, también legales, a nivel español.
"Hay que dar salidas políticas realistas, también legales, al independentismo a nivel español"
-Propone salidas políticas, ¿cree que hay un exceso de judicialización de la política? ¿Demasiado recurso ante el Tribunal Constitucional?
-Cuando uno incumple la ley, la Justicia debe intervenir. ¿Pero es la manera de solucionarlo? Pues no. Hay que rebatir argumentos, dialogar y ceder en algunas posiciones.
-¿Tiene contactos con Puigdemont?
-Muchos contactos y llamadas, la verdad es que no. Tomamos un café un día. El trato es cordial. Puigdemont es un hombre convencido, es independentista, no es como Artur Mas o Jordi Pujol, que criticaban la independencia hace años. Puigdemont cree en la independencia, pero creerse que puede lograrla unilateralmente es otra cosa.
-Tras cinco años de pulso independentista ¿qué radiografía hace de Cataluña?
-Se han producido los mayores recortes sociales de toda España. Se está destinando mucho dinero a cosas innecesarias. Cataluña es la comunidad con más chiringuitos políticos y donde los altos cargos cobran más. Donde la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales es más cara. Y luego es la que menos invierte en sanidad, no hay libros de texto gratuitos, pero sí listas de espera de cuatro años en residencias. Tenemos más oficinas en el exterior, no para internacionalizar la economía, sino para internacionalizar el proceso. Nunca hablamos de lo que hace la Generalitat con los 36.000 millones de euros que tiene de presupuesto.
-¿Qué le parecieron las palabras del ministro Margallo, comparando terrorismo y soberanismo?
-Pues muy desafortunadas, la verdad. Pero se dicen barbaridades por todos lados. La CUP decía el otro día que había que provocar la fuerza bruta del Estado para justificar la independencia. Y estos son socios de CDC. No ayudan estas declaraciones. Los viejos partidos han entregado Cataluña al nacionalismo desde hace muchos años. Hay que reconstruir puentes y discursos que no se oyen ahora.
Que no haya Gobierno de España es culpa de los egos de Rajoy y Sánchez
-¿Hay que recuperar la idea de un bloque constitucionalista en Cataluña entre PSC, PP y Ciudadanos?
-Si hay elecciones en Cataluña nos presentaremos con nuestro programa. Y si hay posibilidad de llegar a acuerdos en el Parlamento catalán para ser una alternativa al rupturismo, ahí estará Ciudadanos. Pero presentarnos todos juntos no, porque sería dar la razón a quienes plantean las elecciones como un plebiscito. Bueno, ahora las llaman constituyentes. Puigdemont es consciente de que tiene que volver atrás. Decían que lo del referéndum ya estaba superado. Volverán a hacer otras catalanas, las cuartas en siete años, que llamarán constituyentes. El señor Puigdemont, por mucho que diga en su programa que va a incumplir la ley, no la va a incumplir. Llevar la independencia en el programa no le da legitimidad.
-En la manifestación de la Diada hubo llamamientos a la desobediencia.
-Llevamos mucho tiempo con un Gobierno español que no ha querido ver la realidad. Si hubiera tenido otra forma de hacer política, esto no habría pasado.
-¿Qué le pareció la exhibición de fuerza del tripartito ERC-CUP-Podemos en la Diada? ¿Qué papel cree que juzgará Ada Colau en un futuro en esa posible alianza?
-Me sorprende el papel de la alcaldesa de Barcelona, que cada vez más se interesa por la política catalana, con los problemas tan importantes que tiene la ciudad. CDC ha renunciado a una ideología que le dio mayorías absolutas y lo único que está consiguiendo es entregar la Generalitat a ERC y a una formación anticapitalista como la CUP. Si tuviera un planteamiento dentro del marco democrático, CDC podía haber tenido perfectamente otros socios. Pero no ha querido.
Una España reformada es la mejor alternativa al secesionismo en Cataluña
-Que Ciudadanos haya pactado primero con el PSOE y después con el PP a nivel de España ¿le puede pasar factura en Cataluña?
-Nosotros no hacemos cálculos electorales. Creo que la gente valora lo que hemos hecho. Tenemos un sistema electoral injusto que nos da un descenso de escaños. Había que intentar formar gobierno porque unas terceras elecciones son un error garrafal. Quizá PP y PSOE intenta aburrir a la gente para volver al bipartidismo, pero seguiremos haciendo lo que tenemos que hacer. Si vuelve a haber elecciones es porque los viejos partidos quieren.
-¿Es un fracaso colectivo?
-Albert Rivera ha sido el único que ha pedido perdón en público en el Congreso de los Diputados, pese a ser el que más esfuerzos ha hecho por desbloquear la situación. Todos tenemos una responsabilidad, pero unos más que otros.
-¿Descarta absolutamente un pacto con Podemos a nivel español?
-Un pacto de Gobierno estable sí porque tenemos dos visiones del país muy diferente, y el suyo sería nefasto. Ellos proponen una subida masiva de impuestos, gasto público desorbitado, pacto con Bildu, referendos… y llegaron a decir que los jueces debían comprometerse con el programa político del Gobierno. Pero acuerdos puntuales en asuntos importantes, no hay ningún problema. Ellos pudieron abstenerse en un pacto PSOE-Ciudadanos, pero no quisieron.
-¿Qué pasó con la propuesta de eliminar las diputaciones que ustedes propusieron y luego se retiró?
-No se retiró. Las diputaciones sobran porque la mayor parte del presupuesto va destinado a mantener la misma diputación. Si eliminamos ese gasto estructural que sirve para enchufar gente, podemos dar más servicio a los municipios pequeños. Pero con PP y PSOE no hemos podido imponer todo nuestro programa electoral porque queríamos llegar a acuerdos. Ya hemos logrado bastante con un compromiso de reducción del gasto en diputaciones. Pero no sé qué tienen que es imposible que PP y PSOE estén de acuerdo.
-¿Ciudadanos ha dejado en segundo lugar la cuestión lingüística?
-No, lo que pasa es que hablamos de todas otras muchas cosas. No hemos renunciado al trilingüismo, está contemplado en los pactos con PSOE y PP. No vamos a renunciar a la defensa de los derechos lingüísticos y a la lucha contra las multas.